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La incoherencia de la seguridad en el fútbol, en el Tróccoli
En el fútbol uruguayo, en lugar de cuidar el producto y proteger a la gente que lo compra, la desalientan. La prueba más contundente fue lo que pasó a la salida del estadio Tróccoli este domingo, al finalizar el partido que protagonizaron el local Cerro y Defensor Sporting por la undécima fecha del Torneo Apertura.
Por los altoparlantes se anunció que los hinchas de Cerro debían esperar 15 minutos para permitir la evacuación de la totalidad de la parcialidad de Defensor Sporting.
A pocos minutos del final del partido comenzó a llover y la gente se protegió como pudo. La tribuna de los violetas, con pocos menos de 200 habitantes se vació rápidamente. Entonces los hinchas de Cerro se agolparon en la puerta de salida principal del Tróccoli. La espera transcurría con normalidad cuando el número mayor de los hinchas albicelestes empezaron a comprobar que en la otra puerta de acceso a la tribuna principal ya había habilitado la salida y la gente había ganado la calle.
Entonces empezaron a gritar pidiendo que se habilitara la salida, como en la otra puerta del mismo sector. Sin embargo, los funcionarios de seguridad privada, vestidos con chalecos naranja, lo impidieron. Niños y gente mayor soportaban las inclemencias del tiempo cuando la paciencia de la gente agolpada en los escalones de salida se empezó a perder.
Los gritos para que abrieran la puerta invadieron el sector. Algunos, indignados, empezaron a sugerir avanzar contra la seguridad para ganar la puerta de salida.
"¡Dale, dale bo! ¡Abrí la puerta!". "Juegan con la gente, dejen de embromar", gritaba la gente indignada cuando de pronto uno sugirió: "¡Vamos a avanzar, dale, dale. Que salgan de la puerta!". Entonces, cuando dos parciales pretendieron salir fueron impedidos lo que provocó discusiones. Se les hizo ver a los funcionarios de la guardia privada que custodiaban esa puerta, que la gente de esa misma tribuna principal estaba saliendo por la otra puerta del mismo sector del estadio.
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Sin éxito de que habilitaran la puerta, le gente optó por lo más simple y caminó por dentro de la tribuna hasta la otra puerta de acceso para salir, incluido el periodista de Referí que fue testigo del insólito hecho.
Cuando por fin habilitaron la puerta de salida, la gente salió molesta y reprochando la actitud, incluidos a algunos policías que estaban en la zona.
El sentido común faltó a la cita: en la misma tribuna, habilitaron una puerta y la otra la mantuvieron cerrada.
Lo curioso del caso es que la salida de la gente se produjo antes de que el ómnibus que trasladaba el plantel de Defensor Sporting abandonara el lugar. Es decir que, los hinchas de Cerro, salieron eludiendo el ómnibus y viendo cómo los jugadores violetas subían el mismo lo que podía haber generado algún grito o situación incómoda.
A los hinchas que ocupaban el talud no se les impidió salir hasta tanto el ómnibus del plantel de Defensor abandonó el Tróccoli.
“Me da pena de ver un montón de cosas lindas que hay para hacer y que están trancadas por no tener sentido de responsabilidad. La frase que siempre utilicé es que el fútbol es de todos, pero el fútbol no es de nadie. Hay que cuidar el producto”, reflexionó la semana pasada Andrés Scotti, integrante de la Comisión Normalizadora de la Asociación Uruguaya de Fútbol.
