La Policía Federal detuvo a bolsonaristas que promueven un golpe de Estado contra Lula da Silva

Según informó la Policía Federal, las medidas fueron ordenadas por Alexandre de Moraes, titular del Superior Tribunal Electoral (STE) e integrante del STF, quien lleva adelante desde el año pasado una investigación judicial sobre las acciones antidemocráticas de la extrema derecha, pesquisa que incluye el rastreo de fondos y la utilización de las plataformas digitales para influir mediante informaciones falsas en las elecciones presidenciales.

El megaoperativo está enfocado en las personas vinculadas a la financiación y ejecución de los bloqueos de rutas, la destrucción del patrimonio público y privado, las amenazas a la población y los atentados contra la Constitución registrados en todo el país luego de la victoria de Lula da Silva en el balotaje del 30 de octubre pasado. En ese marco, la Policía Federal informó que cuatro detenidos, entre ellos dos diputados regional, son del estado de Espírito Santo, en el sudeste del país.

Los allanamientos se realizaron en domicilios de empresarios vinculados al agronegocio y al transporte de cargas en Brasilia, y en los estados de Acre, Amazonas, Mato Grosso, Mato Grosso do Sul, Paraná y Santa Catarina, todos bastiones del bolsonarismo, en momentos en que Moraes mantiene congeladas cuentas bancarias de 43 empresarios ligados a grupos que pidieron un golpe de Estado tras la victoria de Lula da Silva.

Según detallan los medios locales, la Policía Federal secuestró al menos 15 armas automáticas, entre fusiles, pistolas y una metralleta, además de municiones, decomiso de armas que ocurrieron en Santa Catarina, donde los uniformados concretaron 15 allanamientos. Otras 23 órdenes de registro se realizaron en los municipios Vila Velha, Serra, Guarapari y Cachoeiro de Itapemirim del estado de Espírito Santo.

De las cuatro órdenes de aprehensión emitidas por Moraes relacionadas con objetivos en Espírito Santo, dos se cumplieron, mientras que dos sospechosos están prófugos y otros dos, ambos diputados regionales, a pesar de no haber sido detenidos quedaron bajo control judicial mediante tobilleras electrónicas.

El operativo judicial ocurre luego que el lunes por la noche grupos bolsonaristas incendiaran micros y automóviles en el centro de Brasilia como parte de las protestas contra la asunción de del líder del PT, prevista para el 1 de enero. Situación que obligó el futuro ministro de Justicia de Lula da Silva, Flavio Dino, a anunciar que la ceremonia de traspaso de mando estará resguardada de posibles actos de protesta.