El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, respaldó este jueves al secretario general de la ONU, António Guterres, en su petición de que el Consejo de Seguridad del organismo actúe "inmediatamente" y decrete un nuevo alto el fuego que evite "un colapso total de la situación humanitaria en Gaza".
Es la primera vez desde que comenzó su mandato en 2017 que Guterres invoca el artículo 99 de la Carta fundacional de la ONU, que establece que el secretario general "puede llamar la atención al Consejo sobre cualquier tema que en su opinión puede amenazar el mantenimiento de la paz y seguridad en el mundo".
Frente a este pedido, el ministro de Exteriores de Israel, Eli Cohen, dijo anoche que Guterres supone "un peligro para la paz mundial", después de que este activara dicho artículo.
Los 22 países de la Liga Arabe también expresaron “firmemente” su respaldo a la iniciativa de Guterres para que el máximo organismo de Naciones Unidad decrete un alto el fuego, lo que resulta imposible sin el respaldo de todos su integrantes, entre ellos Estados Unidos.
También el primer ministro catarí, Mohamed bin Abdelrahman, así como el ministro de Exteriores egipcio, Sameh Shukri, que actuaron gestores de la tregua entre Israel y Hamas durante una semana respaldaron a Guterres.
La reyerta diplomática tiene como telón de fondo la expansión de la ofensiva israelí sobre el sur de la Franja de Gaza, donde se concentran 1,8 millones de palestinos que huyeron del norte después del ataque de Hamas a Israel y la respuesta Israelí contra los palestinos.
El ejército israelí atacó en las últimas horas docenas de objetivos de las milicias palestinas en Jan Yunis, el principal poblado en el sur del enclave palestinos, asi como en Jabalia, al norte de la Franja, donde está el principal campo de refugiados palestinos.
Las tropas israelíes se enfrentaban este jueves a combatientes del movimiento terrorista Hamás en el corazón de la principal ciudad del sur de Gaza, donde creen que se esconde uno de sus principales líderes, al tiempo que intensificaban su ofensiva en el territorio asediado.
Tras romper las defensas de Hamás en la segunda ciudad más grande de Gaza, tropas israelíes, tanques, vehículos blindados de transporte de tropas y excavadoras entraron en Jan Yunis, obligando a los civiles ya desplazados a huir de nuevo, según testigos.
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, dijo en un comunicado grabado en vídeo que las fuerzas israelíes se estaban acercando a la casa del jefe de Hamás en la Franja de Gaza, Yahya Sinwar, y un portavoz militar afirmó que este se encuentra "bajo tierra" en la zona de Jan Yunis.
Crímenes de guerra
El fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI), Karim Khan, consideró este jueves “imperativo” permitir el acceso de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza y alertó de que impedir de forma intencionada la asistencia a civiles “puede constituir un crimen de guerra” según el reglamento de este tribunal.
En un mensaje de respaldo al secretario general de la ONU, António Guterres, quién activó el artículo 99 de la Carta Fundacional para pedir al Consejo de Seguridad un alto el fuego en Gaza, Khan ha “enfatizado” que permitir la entrada de ayuda humanitaria “de forma inmediata y a gran escala” a la Franja es “imperativo”.
“Deseo reiterar en los términos más claros posibles que impedir intencionadamente el suministro de ayuda a civiles puede constituir un crimen de guerra según el Estatuto de Roma de la CPI (el tratado fundacional de este tribunal internacional)”, escribió el fiscal internacional en X (antes Twitter).
(Con información de agencias)