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Lacalle ultima acuerdo con Pfizer tras cortocircuito con Salinas
Con su estreno en los live de Instagram, Luis Lacalle Pou despidió el miércoles 30 al mediodía el 2020, el primer año como presidente de la República. Lo hizo desde su despacho en el piso 11 de la Torre Ejecutiva rodeado de expedientes y borradores, que denotan buena parte de las tareas administrativas que debe afrontar quien llega a jefe de Estado.
En el mensaje, el presidente agradeció a la población por el comportamiento desde el inicio de la pandemia e hizo un breve comentario acerca de los motivos por los que el gobierno aún no anunció cuándo comenzará la campaña de vacunación contra el covid-19, un tema prioritario para el Poder Ejecutivo y sobre el que las autoridades empiezan a reconocer por lo bajo que el país viene atrasado respecto a otros, incluso de la región.
El presidente, que tuvo reconocimiento internacional por el manejo de la pandemia y logró aprobar el Presupuesto y la Ley de Urgente Consideración, sobre el fin de año enfrenta ahora la presión por las demoras en la vacunas en medio del crecimiento de contagios y también las críticas del Frente Amplio por el nuevo ajuste de tarifas.
Es que el gobierno apostó al Fondo Covax de la OMS para hacerse de 1.500.000 vacunas de doble dosis para inocular a 750.000 personas, pero semanas atrás advirtió que esta iniciativa va camino a fracasar por lo que salió directamente a negociar con laboratorios y estados, una tarea en la que el presidente desplazó de las gestiones al ministro de Salud Pública, Daniel Salinas, para colocarse al frente junto a su mano derecha, el secretario de la Presidencia, Álvaro Delgado.
En esa carrera el gobierno se encontró con un obstáculo inesperado. Las autoridades señalan que el acuerdo con Pfizer/BioNtech por vacunas para inmunizar a 250 mil personas es inminente porque las negociaciones están avanzadas, pero para concretarse la adquisición de las dosis el gobierno tiene que firmar un contrato de confidencialidad con el departamento legal de la firma con sede en Nueva York y el laboratorio está cerrado a nivel global hasta el 6 de enero, por lo que Delgado se encontraba haciendo gestiones por estas horas para agilizar ese trámite.
De todos modos, el gobierno quiere 1.500.000 dosis por lo que las conversaciones se extienden a otros laboratorios y gobiernos, incluido China. En el Poder Ejecutivo evalúan como segunda prioridad, tras la vacuna de Pfizer, poder acceder a la británica elaborada por la farmacéutica Astrazeneca y la Universidad de Oxford, una opción relativamente económica que no necesita ser almacenada a una temperatura tan fría como la de Pfizer/BioNTech, que se debe mantener a -70 grados.
Desde agosto funciona en el MSP un grupo ad hoc que viene siguiendo la evolución de los ensayos clínicos e intercambiando acerca de la suficiencia técnica de cada una de las vacunas. Este equipo será el que deberá dar el aval científico a la hora de la compra, cuyo financiamiento el equipo económico incluirá en el Fondo Coronavirus.
El trámite por la vacuna no estuvo exento de dificultades. La lentitud de reflejos para salir a correr la carrera por las vacunas de forma individual, así como un primer no al consorcio Pfizer/BioNtech realizado por un funcionario de confianza política de Salinas, generaron un cortocircuito en el gobierno, que finalizó con el cese de Franco Alaggia del cargo de coordinador de Relaciones Internacionales y Cooperación del MSP. Alaggia es licenciado en relaciones internacionales, tiene 26 años y es amigo de uno de los hijos de Salinas.
A ello se sumaron las críticas de la oposición, por falta de información sobre el estado de las negociaciones y por el atraso que el país lleva en las gestiones mientras algunos como Argentina, Chile y Brasil ya inoculan a sus ciudadanos.
“Con respecto a la vacuna, hemos tenido una práctica de transparencia que queremos seguir. Si no ha habido información al respecto es porque queremos ser muy serios. En pocos días estaremos informando a la población”, dijo Lacalle Pou en su mensaje de despedida este miércoles.
La vicepresidenta Beatriz Argimón había dicho el miércoles en su podcast La otra agenda que el gobierno estaba “recorriendo el final del período de negociación para adquirir y trasladar” las vacunas contra el covid-19. “Estamos absolutamente seguros, desde nuestro lugar y desde las conversaciones que hemos mantenido con el presidente, que esto se va a dar en breve”, expresó.
A pesar de que fue desplazado, Salinas será quien lleve la voz cantante del gobierno el martes 5, cuando comparezca ante la Comisión de Salud del Senado a pedido del Frente Amplio. El ministro pensaba reunirse con los legisladores de la oposición antes de fin de año, pero canceló tras una directriz presidencial.
El objetivo del Poder Ejecutivo es adelantar el comienzo de la vacunación lo máximo posible y la fecha que aparece más probable en el horizonte es principios de abril.
El debate por las tarifas
Más allá de las vacunas y la gestión del covid-19, Lacalle Pou cerró el año con otro frente abierto por la suba de tarifas públicas dispuesta por el Poder Ejecutivo.
La oposición señala que, a diferencia de lo que dijo el oficialismo, el gobierno realizó un ajuste por encima de la inflación. En el Frente Amplio entienden que deben tomarse los datos desde abril, fecha en la que se hizo el anterior ajuste.
“Asumiendo su argumento, las tarifas quedaron actualizadas hasta abril. Por tanto, estas subas hay que compararlas con la inflación desde abril hasta diciembre”, argumentó el economista Fernando Isabella en M24. El dirigente socialista agregó que sin el dato de diciembre la inflación abril-noviembre fue de 5,31%.
El Ejecutivo dispuso un aumento de 6,19% del precio de la nafta; 6,9% del supergás y mantuvo el precio del gasoil. Además, definió un incremento de 5% promedio de la energía eléctrica con ajustes diferenciales, de 6,5% en OSE, de 9,5% en la conexión a internet de Antel y 6,3% en los celulares, mientras que para la telefonía básica residencial disminuirá en un 5,2%.
La noticia divulgada mediante un comunicado oficial provocó una ola de críticas, principalmente del Frente Amplio, que desempolvó el archivo y le señaló a Lacalle Pou que estaba incumpliendo una de sus principales promesas de la campaña electoral.
“Con este aumento de tarifas hay un grosero incumplimiento de campaña electoral”, dijo el ex subsecretario de Economía, Pablo Ferreri, al programa En Perspectiva, mientras que el senador del MPP, Charles Carrera, agregó que estaban castigando a los uruguayos con las subas mientras les “rebajan sus salarios”.
El 30 de marzo de 2019, al lanzar su campaña en el Parque Viera, Lacalle Pou hizo un discurso en el que señaló que la “austeridad” iba a ser el “centro” de su gobierno y anunció que de obtener la victoria no subiría las tarifas, los impuestos ni los combustibles.
"No quiero gobernantes que despilfarren. La austeridad va a ser centro de nuestro gobierno, en lo grande y en lo chico. Si gana el Partido Nacional se terminó el aumento de tarifas, impuestos y combustibles", dijo en ese entonces.
El fragmento del discurso en el que hace mención al tema se viralizó por estas horas en las redes sociales y fue compartido por decenas de dirigentes frenteamplistas que incluso ocuparon cargos de gobierno en las anteriores administraciones.
