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Las primeras señales de marcha atrás del gobierno por aumento de casos de covid-19
El gobierno empezó a dar las primeras señales de marcha atrás en algunas medidas que se tomaron por la estabilidad en casos de covid-19 en Uruguay, situación que cambió en los últimos días debido al aumento de contagios, especialmente en el departamento de Rivera.
Este miércoles dio marcha atrás a la reapertura de vestuarios en gimnasios, academias y clubes sociales y deportivos, según informó esta mañana la Secretaría Nacional de Deportes (SND) en acuerdo con el Ministerio de Salud Pública (MSP).
El reintegro duró solo un día, dado que el decreto habilitante firmado por el titular de la SND, Sebatián Bauzá, el subsecretario, Pablo Ferrari, y el gerente general, Gerardo Lorente, establecía la reapertura a partir del pasado martes. El texto mandataba a las instituciones deportivas a "estrictamente cumplir con el aforo pertinente y los protocolos establecidos a estos efectos".
Además, el MSP resolvió una serie de medidas sanitarias durante 30 días para contener el aumento de casos exponencial de covid-19 en Rivera, donde, este martes, se detectaron 23 nuevos casos y hay 123 personas cursando la enfermedad.
Según la resolución del ministerio, en el departamento fronterizo hay un caso de covid-19 positivo activo, cada 841 habitantes, "superando los índices de cualquier otro departamento, incluyendo a Montevideo (uno cada 6.466 habitantes), y a la totalidad del país (uno cada 7.660 habitantes)". En el departamento se concentra el 28,6% de todos los casos de Uruguay.
En cuanto a las medidas asistenciales, las autoridades de salud establecieron que los prestadores públicos y privados deberán suspender todas las cirugías que no sean urgentes, priorizar las modalidades de atención fuera de los hospitales –por ejemplo consultas telefónicas y telemedicina–, focalizando la atención en los centros de salud para los casos de covid-19.
Además, solo un acompañante podrá ingresar a los hospitales por usuario para los controles de embarazo o partos, y cuando haya pacientes internados; y se extremarán las medidas de protección que deberán utilizar. Por otra parte, se elaborará un registro que indique qué funcionarios trabajan en centros médicos de Brasil.
En cuanto a las clases, no se controlará la asistencia educativa en los centros educativos del departamento, que había comenzado a aplicarse el pasado 13 de octubre.
Por otra parte, el MSP exhorta a los empleadores que adopten medios de trabajo a distancia, para "minimizar la permanencia física en los lugares de trabajo".
También se solicita a las autoridades departamentales que suspendan los eventos que impliquen aglomeración de personas y se reitera la prohibición de realizar fiestas privadas.
Además, se remarcó la obligatoriedad de utilizar tapabocas cuando se viaja en medios de transporte públicos.
Para los locales comerciales y turísticos, rigen medidas específicas como respetar el nivel de aforo dispuesto por el MSP –una persona cada cinco metros–, especificar las medidas de prevención exigidas en la cartelería exterior del local, controlar la temperatura al ingreso, exigir el uso de máscara facial para todas las personas que ingresen y permanezcan en el local, entre otras.
En cuanto a los eventos religiosos, donde se generaron varios brotes de contagios de covid-19, el gobierno anunció que regirán las disposiciones actuales que adoptó la Intendencia de Rivera, que implica una única celebración por día con una duración máxima de 45 minutos, el uso obligatorio de tapabocas y evitar concurrir a reuniones en templos de Brasil.
El MSP hace hincapié en que en caso de no respetar las medidas dispuestas en la resolución, se aplicarán multas y clausuras.
La situación en Rivera preocupa a expertos que analizan diariamente la situación de covid-19 en Uruguay. El director ejecutivo del Institut Pasteur, Carlos Batthyány, considera que a la ciudad hay que "cerrarla, hacer un cinturón sanitario, y bloquearla".
"Está totalmente fuera de control. En números de la Unión Europea con 123 casos –de personas cursando la enfermedad hasta este martes– está casi entrando en zona roja, 150 es el límite que se pone para entrar y tiene tendencia acumulada. Eso es muy preocupante", señaló este miércoles en entrevista con En Perspectiva.
Dudas sobre la frontera
El director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), Isaac Alfie, dijo que este miércoles habrá una reunión con el Grupo Asesor Científico Honorario (GACH) y se analizará la eventual apertura de fronteras de cara a la temporada de verano –algo que reclama el sector turístico, en crisis desde que comenzó la pandemia– y que antes del final de esta semana se tomará una resolución.
Además, se evalúa si se permitirá el ingreso de uruguayos en el exterior, que todos los años llegan al país para pasar las fiestas con sus familias y vacacionar. "Hay que ver si el contingente de uruguayos puede entrar al país o no le permitimos el ingreso", sostuvo el director de la OPP en entrevista con el programa Así nos va de radio Carve.
