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Las ventajas que da esta preolímpica de Uruguay respecto a sus rivales
La selección sub 23 de Uruguay que se prepara para disputar el Torneo Preolímpico que dará dos lugares en los próximos Juegos Olímpicos de Tokio 2020 y que este sábado a la mañana terminó su preparación en lo que respecta a partidos amistosos venciendo con el equipo alternativo a Progreso por 2-1 en el Complejo Uruguay Celeste, afrontó diversos inconvenientes de preparación y de esa manera, brinda ciertas ventajas respecto de sus rivales.
Si bien primero se tardó un mes y medio en nombrar o ratificar en su cargo al técnico Gustavo Ferreyra luego de terminados los Juegos Panamericanos, posteriormente la celeste también tuvo otros problemas que afrontar.
El combinado uruguayo iba a comenzar a entrenar el 9 de diciembre pasado y debió postergar el inicio en una semana para el 16, debido a que el Campeonato Uruguayo se retrasó justamente ese lapso.
Los tricolores, luego de conseguir el título, le dieron libre a sus futbolistas unos días antes de que se pudieran sumar a la selección sub 23.
Por su parte, Peñarol determinó no ceder a sus jugadores a este combinado preolímpico, entre ellos, a Facundo Pellistri, elegido como la revelación del pasado Campeonato Uruguayo en la encuesta Fútbolx100 de Referí.
A su vez, también se cayó la llegada de otro futbolista que fue un puntal en el Torneo Apertura pasado antes de que se hiciera su pase a México con préstamo al fútbol chileno y más precisamente a la U de Chile: Leonardo Fernández.
Otro tema es que hubo que esperar a Juan Manuel Sanabria hasta principios de año por sus compromisos con Atlético de Madrid y a Federico Viñas hasta el 7 de enero pasado porque definió con América de México el título.
Todo esto se suma a que a este combinado celeste se le complicó mucho el hecho de poder arreglar encuentros con rivales internacionales.
En este lapso enfrentó a la selección de la Liga Premier de México y a la selección de la Federación Gaúcha. Ningún compromiso contra combinados de Sudamérica.
Asimismo jugó contra San José Capital, Canelones del Sur, Colonia y Progreso.
Los rivales llegan muy bien
Salvo Bolivia, como contrapartida, los otros tres rivales que tendrá Uruguay en el Torneo Preolímpico de Colombia, llegan muy bien.
Paraguay que será el adversario del debut, tuvo ya dos partidos ante Venezuela en noviembre y la derrotó 3-1 y 3-0.
A principios de diciembre enfrentó dos veces a Colombia ganó 3-1, perdía 2-0 y empató 2-2 y este martes que pasó, empataron en Argentina con el local 1-1 (ganaban 1-0).
Asimismo, le prestaron a todos los futbolistas del exterior y cuenta con ocho jugadores de ese nivel.
Brasil, el segundo rival, es, como suele suceder, el más fuerte (en este caso, junto con los paraguayos).
Los únicos jugadores europeos que no le prestaron fueron los de Real Madrid. Es uno de los que más competencia previa tiene.
Fue a España y pese a que lo dominó durante casi todo el encuentro, perdió con Argentina 1-0.
Le hizo cuatro goles a Francia, enfrentó a Colombia, jugó con Islas Canarias, con Japón, tiene un bagaje grande de partidos.
El Torneo Brasileño lo arman dándole preferencia a la selección.
Bolivia sí que está más complicado que los demás.
Tenía dos partidos pactados en noviembre con Venezuela y por los temas políticos en su país con Evo Morales, no pudo hacerlos y no ha tenido compromisos internacionales.
Por su parte, Perú, el último de los rivales en el grupo celeste, jugó con Ecuador y hace dos días con El Salvador, al que venció 2-1 y este sábado lo enfrentará de nuevo. Por problemas de pasaje no pudieron jugar ante Argentina de visitante.
Como se puede apreciar, la selección uruguaya sub 23 va a dar ventajas importantes en materia de competencia de cara al Preolímpico de Colombia.
Más allá de ello, Gustavo Ferreyra y los suyos van con toda la fe intacta por uno de esos dos cupos para Tokio 2020.
