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Los factores que tienen contentos a los façoneros de pollos
El consumo de carne aviar en el mercado interno se sostiene en buenos niveles, tras el crecimiento que hubo en los últimos meses, derivado de la mayor demanda china por carne vacuna, destacó a El Observador Daniel Pereyra, productor y presidente de la Cooperativa Nacional de Façoneros de Pollos Unidos (Conafpu).
El directivo gremial añadió que eso se percibió especialmente durante las recientes fiestas de Navidad y Año Nuevo y también en las primeras semanas de 2020, cuando incluso en este segmento de la comercialización de agroalimentos no se notó un impacto adverso a consecuencia de una anunciada menor actividad en el turismo.
“Al menos para el caso de la carne de pollo, la demanda fue muy buena, se sostuvo en un buen nivel, en estas semanas por ejemplo hemos visto que ha ido mucha carne de pollo hacia la zona este del país y eso nos sorprendió para bien, cuando desde las industrias se habían tomado precauciones porque hace un tiempo se hablaba de una temporada floja”, dijo Pereyra.
Esa demanda sostenida, tanto por el pollo entero como por diversos productos con otro nivel de procesamiento, ha determinado incluso que actualmente el tamaño del pollo que se encuentra en el mercado sea algo menor al habitual, dado que fue necesario adelantar los procesos de salida de pollos desde los galpones con destino a la faena para satisfacer un nivel de pedidos que “no ha decaído”.
Pereyra comentó, en ese marco, que actualmente hay unos 220 façoneros con aves en sus galpones y que se está registrando un ingreso semanal a los mismos de 630 mil aves.
Un buen verano
Estamos además en un verano que, salvo en algún caso puntual en diciembre con días muy calurosos, ha sido beneficioso porque ha tenido días más frescos que lo habitual y eso es bueno para la cría de aves, que son animales muy sensibles a las temperaturas extremas y que con condiciones de temperatura adecuada evolucionan de mejor manera.
Por lo tanto, este año por lo menos de momento no hubo casos de mortandades muy notorias, cosa que sí ha sucedido en otros veranos.
Solo hubo algún caso aislado, como uno debido a un corte en el suministro de energía eléctrica que impidió una adecuada ventilación y la aplicación de agua por aspersores para el control de la tempertura.
Sobre cómo le está yendo al productor façonero, que en líneas generales es un empresario de porte familiar, comentó que se han ido realizando inversiones en infraestructura en los espacios productivos y mejoras en técnicas de manejo, que sumadas a las mejoras a nivel genético de las principales líneas de cría y la calidad de granos que se utilizan hoy, han permitido avanzar en la eficiencia y de ese modo obtener un margen de rentabilidad.
“El precio está bien, solo ha sucedido que ha quedado una sobreoferta en el área de galpones disponibles y hay productores que están haciendo menos crianzas por año, no hay la continuidad ideal y hay casos en los que hay más tiempo de espera para reanudar la actividad, pero eso de paso permite que las crianzas que ingresan se desarrollen de mejor modo, con más eficiencia”, explicó.
A propósito, Pereyra destacó que actualmente la eficiencia ha progresado tanto que se está en líneas generales en un promedio de conversión de 1,8 kg de ración a 1 kg de pollo en pie, cuando hace pocos años se precisaban al menos 2 kilos de alimento.
“Eso hace que el pollo actualmente sea una de las proteínas animales de mejor convertibilidad”, subrayó, admitiendo que se ha evolucionado mucho en la calidad de las raciones, que hoy son con base en maíz y soja, cuyos granos también son mucho mejores en cuanto a la calidad nutritiva hoy por la evolución que también se ha dado en la genética vegetal.
Por otro lado, afirmó, “los índices de mortandad han bajado tanto que son envidiables incluso para mercados del primer mundo, estamos en un 2% cuando hace cinco años era un 5%”.
La disponibilidad de una mejor genética ha permitido también que el proceso de cría se complete en una menor cantidad de días, lo que disminuye los costos productivos, achica la posibilidad de pérdidas por mortandad y también deriva en una mejor calidad del producto final.
En definitiva, dijo Pereyra, “lo que de pronto la cadena productiva no puede lograr por el lado de una suba de precio por el producto final sí se está logrando por el lado de la eficiencia productiva”.
Más celo por bienestar animal en los galpones de cría
En otro orden, desde el sector se recibió con satisfacción la resolución oficial, adoptada por el Poder Ejecutivo con base en decisiones de los ministerios de Ganadería, Agricultura y Pesca y Salud Pública, que aplicó cambios en el decreto 170/04 –que regula la operativa en las granjas y la habilitación de las mismas–, instaurando exigencias relacionadas con el bienestar animal.
Por ejemplo, un nuevo artículo que se entiende es de alto valor es el que otorga el aval para decomisar aves que no estén pasando bien y que así puedan ser trasladadas a otros ámbitos productivos en los que sean manejadas del modo correcto, sobre todo en los aspectos sanitarios y alimenticios.
Pereyra recordó casos en los que, por distintos motivos, importantes conjuntos de aves quedaron en los galpones sin recibir su alimentación y murieron, lo que ahora se puede evitar al estar autorizado el decomiso y su deriva, por ejemplo, a un tercero que financie el resto del proceso de cría.
“Eso es un tema muy importante, es algo que realmente hacía falta en el sector, porque el tema del bienestar animal está cada vez más presente en las actividades del comercio internacional, pero también en las del mercado interno porque a nivel global tenemos, por suerte, consumidores y también productores cada vez más responsables, así que con esa resolución nos pusimos al día”, reflexionó.
Llegan las cajas negras
Finalmente, otro cambio que se entiende “será un antes y un después” en el sector avícola es la puesta en marcha de las denominadas “cajas negras” en las plantas industriales donde se faenan pollos.
“Están prontas para funcionar en todas las plantas, eso pondrá reglas claras para todos en el sector, se tendrá el 100% de control de todo el proceso de la faena y la evasión fiscal no será ahora un factor de incidencia en la competividad entre las empresas”, declaró Pereyra.
La fiesta del pollo y la gallina
