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Maldonado Nuevo y San Carlos: dos focos de la guerra narco departamental
Dos muertos, siete heridos de bala en intentos de ajuste de cuenta y amenazas cruzadas. En las últimas dos semanas el enfrentamiento entre dos grupos criminales de San Carlos y tres de Maldonado Nuevo se intensificó a tal punto que obligó a la policía y la fiscalía a acelerar una serie de investigaciones sobre narcotráfico que apuntan a estos dos territorios en disputa.
El primero de estos episodios tuvo lugar el pasado 16 de mayo, cuando el Kane, un conocido narcotraficante de San Carlos, recuperó la libertad tras cumplir una pena de 14 meses de prisión, condenado por los delitos de receptación (poseer artículos robados) y porte de arma. El hombre circulaba en su auto Volkswagen Bora sobre las 17 horas por la céntrica Avenida Alvariza de San Carlos, cuando fue interceptado por una moto desde la cual se efectuaron varios disparos, hiriéndolo a él y a la mujer que lo acompañaba.
El caso, que es investigado por la policía a pesar de que las víctimas decidieron no hacer denuncia, es tratado como un nuevo episodio de violencia entre grupos criminales en esta ciudad acostumbrada a las luchas narcos. Es que San Carlos supo ser el territorio de tres capos de la droga: el Kane –preso desde marzo de 2018 hasta mayo de 2019-, el Dany –preso por homicidio desde julio de 2017- y el Buñuelo -quien fue condenado en noviembre de 2018 a dos años de prisión por delitos de narcotráfico-.
Según contó una fuente de la investigación, la detención de este último dejó la vía libre para que un nuevo actor reclamara el control de San Carlos. Por eso, el retorno de el Kane supuso una amenaza para el hombre que pretendía monopolizar el mercado de la droga y se propuso matarlo.
Tras fallar, la gente de Kane y la de este nuevo actor –cuyo nombre es tratado con reserva por los investigadores- comenzaron a amenazarse mutuamente. Los primeros para vengar el ataque, los segundos para terminar el trabajo.
El clima hostil llevó a que el pasado viernes el Ministerio del Interior enviase una dotación de la Guardia Republicana para montar patrullajes preventivos en la zona, una estrategia que había sido aplicada en el Chuy (Rocha), cuando en abril de 2018 se produjeron varios homicidios a ambos lados de la frontera en el marco de un enfrentamiento entre grupos criminales.
Sin embargo, y a pesar de esta acción, el pasado 20 de mayo en la esquina de la Avenida Ceberio y la calle Tomás Berreta de San Carlos, un hombre fue baleado en un intento de homicidio que para los investigadores está relacionado entre la banda del Kane y los que reclaman el monopolio del mercado de la droga.
Por otra parte, y en un hecho que para los investigadores no guarda relación con la disputa de San Carlos, dos jóvenes murieron y cuatro resultaron heridos cuando el auto en el que circulaban fue interceptado por otro en la intersección de las rutas 9 y 93, cerca de Pan de Azúcar desde el que se efectuaron varios disparos. Entre los muertos está un joven poseedor de varios antecedentes penales –había estado preso por un homicidio cometido en 2015– que era un importante integrante de una banda del barrio de Maldonado Nuevo conocida como Los Patas Blancas.
El caso es investigado por la policía como un ajuste de cuentas perpetrado por dos personas, un hombre y una mujer (ambos identificados y con ordenes de captura en su contra) pertenecientes a una de las dos bandas criminales que se disputan con Los Patas Blancas el territorio de Maldonado Nuevo. Según dijeron fuentes policiales, tras este hecho comenzaron las amenazas cruzadas que los efectivos pretenden evitar que se concreten.
Los jóvenes que iban en el auto junto a los fallecidos y que lograron sobrevivir se negaron a dar declaraciones a la policía y tampoco hicieron denuncia del ataque que sufrieron. Según supieron los investigadores, los seis jóvenes habían pasado la noche en el Viejo Tacuarí, un conocido boliche de Pan de Azúcar. El día del ataque también estaba en el boliche el hermano del Kane, pero hasta el momento no hay nada que lo vincule con el crimen.
La ruta del Este
Distintas fuentes consultadas por El Observador coinciden en que no hay vínculos entre los grupos que se disputan San Carlos y los que mantienen un enfrentamiento en Maldonado Nuevo, puesto que cada uno respeta el territorio del otro. Sin embargo, mientras que los de Maldonado Nuevo tienen su acción básicamente circunscripta a esa zona de la capital fernandina, los de San Carlos tienen conexiones con los narcos de Minas y de Rocha.
El 2 de mayo de 2018 el director nacional de Policía, Marío Layera, había dicho en la Comisión de Asuntos Internacionales que el Ministerio del Interior y la Fiscalía General de la Nación habían creado "un núcleo de investigación" para abordar los enfrentamientos entre las bandas de narcotraficantes de San Carlos, Chuy y Minas, en el que participaban de forma "conjunta" fiscales de Rocha, Maldonado y Lavalleja. Los investigadores han encontrado conexiones entre los grupos de narcotraficantes que se reparten esos tres mercados.
En el caso de San Carlos, las conexiones con el Chuy permiten el ingreso de droga al país, aprovechando la frontera seca. Asimismo, también existen alianzas con los bandas de Minas.
De hecho, la detención en enero y posterior condena hace apenas una semana de uno de los líderes del mercado de la droga en Minas, Martín Acuña, avivó el fuego para el enfrentamiento en San Carlos, según contó una fuente policial. Acuña, había sido apresado cuando circulaba por la ruta con tres kilos de cocaína.
La fuente señaló que la conexión Chuy, San Carlos y Minas tiene como objetivo el control del mercado de la droga en el este del país, un mercado especialmente redituable durante la temporada de verano.
