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Más cambios en ALUR: Álvaro Lorenzo fue designado como nuevo gerente general por Directorio de ANCAP
El Directorio de Ancap aprobó este jueves por unanimidad designar a Álvaro Lorenzo como el nuevo gerente general de Alcoholes del Uruguay (ALUR). La designación se dio luego de un proceso de selección desarrollado a través de una consultora privada.
Lorenzo es abogado, empresario, y tiene un MBA en dirección y administración de empresas por el IEEM. En el pasado también se desempeñó como director y CEO del grupo Schandy, fue diputado por el Partido Nacional en el período 2005-2010, pero luego se alejó de la política partidaria. También es propietario de la bodega y viñedo Alto de la Ballena en Maldonado y es director del proyecto vinícola Cerro del Toro en Piriápolis.
La gerencia general de ALUR había sido ejercida hasta el año pasado por Gastón Scayola. El ejecutivo renunció a su puesto en 2020 tras recibir una propuesta para volver a desempeñar tareas en el grupo argentino Perez Companc (propietario del frigorífico San Jacinto), según supo El Observador en base a fuentes del ente.
Por otro lado, en setiembre del año pasado Ancap había definido la contratación de un director independiente para presidir sus sociedades vinculadas ALUR, Cementos del Plata y Ducsa. Esa tarea está a cargo del extitular de Esso Argentina Alfredo Fernández Sívori.
Esa contratación se enmarca en un nuevo esquema de la gobernanza de las sociedades controladas por la empresa, que tiene por objetivos la simplificación del relacionamiento de Ancap con sus subsidiarias, la mejora en la coordinación e implementación de las políticas corporativas y el aprovechamiento de recursos, había informado el ente.
El nuevo plan de Alur
La semana pasada Ancap presentó un plan quinquenal para promover una adecuación de la economía y mejorar la eficiencia de la planta de ALUR en Bella Unión, en el marco de las nuevas exigencias legales del Poder Ejecutivo que tiene ahora el ente petrolero para adecuar su eficiencia y cortar con los subsidios cruzados de su giro industrial. ALUR es 91% propiedad de Ancap y 9% de Pdvsa.
"Para lograrlo, incorpora conceptos que reconocen el rendimiento agrícola en un nuevo modelo de contrato para la compra de azúcar y un nuevo modelo de financiamiento de la cosecha. También incluye inversiones para mejorar la eficiencia energética en el ingenio azucarero", informó Ancap por medio de un comunicado.
La última zafra de azúcar -que culminó en noviembre pasado- fue una de las mejores en muchos años, dejó una cosecha de 400 mil toneladas, por encima de las 360 mil toneladas de la campaña previa. Según el ente, el buen funcionamiento industrial sin interrupciones generó 23 mil metros cúbicos de bioetanol y 20 mil toneladas de azúcar refinada.
Sin embargo, esos números están lejos de generar un precio de bioetanol competitivo y alineado a la planta de Paysandú. En Bella Unión, el costo de producir ese biocombustible es de unos US$ 2.300 por metro cúbico, mientras que en Paysandú es de unos US$ 900 por m3.
