Mercado ganadero no convalida el ajuste que propone la industria

En la semana dominó la incertidumbre. La industria frigorífica propone un ajuste de precios para el ganado gordo que los productores se resisten a convalidar. Y eso se tradujo en una menor operativa.

El pico de la poszafra quedó atrás y ahora se plantea un nuevo punto de equilibrio. Para los mejores novillos gordos el techo está en US$ 3,35 por kilo carcasa, prácticamente 20 centavos por debajo de hace dos semanas. Y para la vaca gorda especial el máximo valor ofrecido es de US$ 3,20 por kilo.

Las industrias mejor abastecidas dan entradas a planta entorno a 20 días y proponen precios muy inferiores. Otras, menos compradas, proponen entradas de una semana y ofrecen mejores valores.

La disponibilidad forrajera varía por zonas, pero el exceso de lluvias del mes pasado frenó el crecimiento de los verdeos y por eso ha sido gradual la aparición de este tipo de ganados. Los productores que no tienen abundancia de alimento, venden. Quienes pueden retener, esperan. La oferta de ganado de corral, mientras, va disminuyendo.

Para la semana próxima "no creo que estén los US$ 3,50 que había ni tampoco los US$ 3,30 a lo que quieren comprar hoy", señaló un consignatario consultado. La expectativa es que los valores para novillo gordo se ubiquen entorno a los US$ 3,35 para la próxima semana y alrededor de US$ 3,15 para la vaca.

Qué suceda con el tiempo será un factor clave en cómo evoluciones la oferta.

La faena semanal, en tanto, fue la mayor desde marzo. Al 18 de agosto totalizó 47.076 cabezas, 4,2% por encima de las 45.170 de la semana anterior y casi cinco mil más que en la misma semana de 2017, cuando se industrializaron 42.551 animales. Las vacas tuvieron mayor participación, con 23.730 cabezas, el 50,4% del total. El 48,4% correspondió a novillos, con 22.794 cabezas.

En ovinos, la operativa es muy escasa. Los negocios se concretan en torno a las referencias de la Asociación de Consignatarios de Ganado y todas las categorías mantuvieron sus valores de la semana anterior. Los corderos US$ 3,35, corderos pesados US$ 3,43, los borregos US$ 3,40, los capones US$ 3,15 y las ovejas US$ 3,10.

La faena semanal de ovinos totalizó 13.931, un 16% menor que las 16.602 de la semana anterior y 8% por debajo que en igual semana del año pasado, cuando se faenaron 15.068. La faena de ovejas fue de 2.822 cabezas, aproximadamente 1.000 más que en igual semana de 2017, cuando se enviaron a planta 1.801. Su participación en la faena total fue de 20%, nueve puntos porcentuales más que en igual período de 2017.

El precio mensual de exportación de carne vacuna subió de forma constante hasta junio, cuando alcanzó el mayor promedio del año, US$ 3.749 por tonelada. A partir de ese máximo, ajustó levemente en baja.

En julio el promedio pasó a US$ 3.609 y en lo que va de agosto a US$ 3.520, apenas por encima del promedio de un año atrás, de US$ 3.491, según datos del Instituto Nacional de Carnes.

Pese al ajuste mensual, el valor promedio semanal al 18 de agosto volvió a ubicarse arriba de los US$ 3.600 –en US$ 3.616–, un salto de 10% comparado con los US$ 3.275 de la semana anterior.

En el acumulado del año se mantiene 5,4% arriba que en igual período de 2017, con US$ 3.570 por tonelada, arriba de los US$ 3.386 en 2017. El volumen exportado sigue arriba en la comparación interanual, con 287.413 toneladas peso canal, 1,7% arriba de las 282.682 del año pasado.

En el caso de la carne ovina, en la comparación semanal el valor de exportación se recuperó. El promedio por tonelada fue de US$ 3.837, un 8% arriba de los US$ 3.551 previos.

En el acumulado de 2018 la suba es destacada, con un promedio de US$ 4.564 por tonelada, 12% arriba de los US$ 4.057 en mismo intervalo en 2017. El volumen enviado al exterior es levemente inferior (-1,8%), con 7.898 toneladas frente a 8.043.