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Narcotráfico: demostración de fuerza de la Corte, jueces y fiscales argentinos
Las crecientes amenazas, intimidaciones a los jueces y fiscales argentinos que investigan a las bandas de narcotraficantes en la ciudad santafesina de Rosario fue el motivo para que la Corte Suprema, en su totalidad, y los principales jueces argentinos se hayan reunidos en esa ciudad argentina como gesto de solidaridad y advertencia hacia el poder político.
En los últimos meses recrudecieron las amenazas e intimidaciones a los jueces y fiscales que investigan el narcotráfico en Rosario, considerada una de las más violentas y con la tasa de homicidios más alto de Argentina y del Mercosur.
Las disputas de las bandas como la de Los Monos y de Lindor Alvarado, con complacencia de sectores de la política y de la Policía de esa provincia, encendió las alarmas de los colegas judiciales que se movilizaron hacia Rosario con la Corte Suprema a la cabeza. El dato no es menor, la Corte argentina vive por estos días problemas de funcionamiento internos y la presencia de los cuatro cortesanos es considerado todo un dato político.
La reunión en la Universidad Nacional de Rosario fue convocada por la agrupación Ajufe (Asociación de Jueces Federales) grupo que nuclea a los poderosos jueces federales de la Argentina y en especial de la Ciudad de Buenos Aires.
El titular de la Corte Horacio Rossatti abrió el fuego hacia la política (en especial hacia el gobierno argentino) al afirmar que "la indiferencia es complicidad , no se puede ser neutral ante el narcotráfico".
La reunión se dio en medio del asesinato por manos de sicarios (ajustes de cuentas que son comunes en Rosario) del fiscal antidrogas paraguayo Marcelo Pesci e incluso los presuntos ajuste de cuentas que se produjeron en Montevideo y que llevó a una reunión entre el presidente Luis Lacalle Pou y su ministro del Interior, Luis Alberto Heber.
En relación a la Argentina los jueces además de seguridad piden cumplir con las vacantes de los juzgados federales quienes deben, entre otras cosas, investigar el narcotráfico. Rosario cuenta con sólo dos juzgados en material penal. En tanto que la Cámara Federal de Apelaciones tiene vacantes no cubiertas.
Al respecto Rossatti señaló: "Reclamamos también la cobertura de las vacantes existentes con los magistrados más idóneos y comprometidos con los valores democráticos y con la defensa de la sociedad frente a las distintas manifestaciones del crimen organizado". "La provisión de las herramientas tecnológicas que nos permitan combatir a esta delincuencia sofisticada en condiciones -al menos- de paridad", planteó.
Otro de los disertantes, que le tocó cerrar el evento, fue el miembro de la Corte Ricardo Lorenzetti quien reconoció que "no hubo una política de Estado durante los últimos diez años" y eso posibilitó el avance del narcotráfico en el país.
La reunión de los jueces no pasó desapercibida por la clase política de la provincia y nacional. Muchos de los magistrados que concurrieron a la reunión llevan causas de alto impacto público contra las administraciones de Mauricio Macri y Cristina Fernández.
