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Ostojich no terminó con la polémica
La presión estaba en su punto de ebullición. Nacional, en la voz de su presidente José Decurnex, había anunciado que “ningún árbitro le daba garantías”. Unos días después se produjeron una serie de incidentes en la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) con un grupo de personas, identificadas con Nacional, que ingresaron a la AUF con banderas con insultos contra los arbitrajes.
Hasta hace un buen tiempo, Peñarol no quería bajo ningún concepto a Andrés Cunha con el que ahora los tricolores están que trinan.
Nacional no quería a Daniel Ferdorczuk por su arbitraje en la final del último Uruguayo.
Christian Ferreyra había sido elegido para conducir el clásico de la Villa el sábado.
Por lo que los candidatos para conducir el clásico se reducían a dos o tres nombres. Con un detalle, sería un árbitro de la nueva camada.
No era un clásico más. Era un partido pesado porque era histórico al ser el primero en el Campeón del Siglo.
Y en el medio de la jaula soltaron a Esteban Ostojich. En líneas generales un buen arbitraje, con una única gran polémica que le achaca Nacional, incluido su DT (ver página 5): que Agustín Canobbio no recibiera amarilla tras reaccionar ante una provocación de Rodrigo Amaral, lo que hubiese significado su expulsión porque ya estaba amonestado. O por lo menos que no le sacaran amarilla en la incidencia a ningún jugador de Peñarol dado que más fuera de tono que lo realizado por Canobbio fue lo que hicieron Walter Gargano o Gabriel Fernández en los forcejeos.
El árbitro, a instancias del línea y el cuarto árbitro, amonestó solo al 10 de los albos que se le fue encima al jugador aurinegro que fue al piso tras recibir una dura entrada de Matías Viña que no fue sancionada con falta. Con la roja a Bergessio minutos después, la acción tomó otra relevancia, y reflotó las críticas tricolores de que vienen siendo perjidicados por los jueces.
Ostojich marcó la cancha de primera. A los tres minutos de juego Canobbio y Rafa García fueron por una pelota dividida, el tricolor llegó antes y el aurinegro lo impactó con la pierna en alto. Amonestó bien a Canobbio.
Un detalle de su estilo de conducción del clásico, el primero a nivel oficial, fue que se mostró contemplativo. Habló con los jugadores, pero también mostró autoridad. De hecho terminó mostrando siete tarjetas. Amarillas para Canobbio, Lema, Cristian Rodríguez, Gargano, Amaral y Kevin Ramírez y expulsó a Bergessio.
La roja de Bergessio
El delantero de Nacional, Gonzalo Bergessio, fue el único jugador expulsado, por doble amonestación. El argentino se regaló y el árbitro lo terminó echando correctamente.
La primera amarilla la recibió a los 27’ cuando cruzó innecesariamente a Walter Gargano y la otra después de la refriega cuando llegó tarde a una pelota divida con Gargano al que le terminó pegando con la pierna en alto debajo de la rodilla.
En el complemento, cuando la adrenalina fue en aumento, Ostojich amonestó bien a Cristian Rodríguez y Cristian Lema.
Es cierto que el partido no contó con incidencias muy complejas ni dudosas. Es que el juego fue opaco, con escasas situaciones de gol por cada lado.
Los equipos merodearon poco el área y la lucha se centró entre el bloque defensivo que paró Nacional, contra la inoperancia de Peñarol.
Pero de todos modos, Ostojich se plantó en un partido que en los papeles no se presentaba como sencillo. Solo dejó dudas en la incidencia del tumulto.
Peñarol no quería perder bajo ningún concepto el primer partido en su escenario, al tiempo que Nacional había recusado a todo el Colegio de Árbitros y, en la voz de su presidente, había manifestado que ningún árbitro le daba garantías. Con ese panorama, era difícil que el juez se fuera sin cuestionamientos.
