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Los suplentes de Peñarol no fueron la solución para el Peñarol de Saralegui
Cuando los hinchas de Peñarol comenzaron a ver en las redes sociales el probable equipo que se perfilaba para enfrentar este sábado a Montevideo City Torque, no lo podían creer. El entrenador Mario Saralegui iba a mover prácticamente toda la oncena, por lo que los simpatizantes carboneros no presagiaban un buen resultado en el Campeón del Siglo.
Pensando en el partido del martes ante Colo Colo por la Copa Libertadores, el técnico ratificó su plan, con nueve variantes con respecto a la alineación que colocó entre semana ante River Plate.
Y se cumplieron los pronósticos de los hinchas. Peñarol no pasó del empate a cero ante City Torque, mostró algo de buen juego solo en el segundo tiempo, y se despidió del Apertura, un torneo muy apretado y parejo, lo que quizás hizo pensar a los aficionados aurinegros si no fue muy extrema la decisión de su DT, de jugársela por la Copa cuando aún quedaban, luego de este fin de semana, tres fechas por disputar.
El equipo que colocó Saralegui ante Torque tuvo solo a Kevin Dawson y a Rodrigo Abascal de los que habían estado desde el arranque ante River. El once fue con Dawson; Juan Acosta, Robert Herrera, Enzo Martínez y Abascal; Matías de los Santos y Krisztián Vadócz; Agustín Álvarez Wallace, Christian Bravo, Denis Olivera y el argentino Nicolás Franco, quien tuvo su debut oficial.
Lo primero que llamó la atención fue la ubicación de Absacal como lateral izquierdo, un zaguero que se destaca por su marca y corpulencia y que no tiene la subida ni la técnica que debe tener un jugador de banda.
Con un equipo nuevo y con pocos días de trabajo en cancha, Peñarol mostró muy poco en el primer tiempo.
Fiel a su estilo de juego, Torque tomó la posesión de la pelota en los primeros minutos, llegando con el control, pero sin poder pisar el área aurinegra. Al equipo de Pablo Marini le faltó el último toque ofensivo.
El aurinegro, con Saralegui dando órdenes continúas a sus jugadores, tuvo que hacer un gran esfuerzo para recuperar el balón y, cuando lo lograba, para retenerlo. “Moverse”, pedía el DT. “¡Cuidala!”, gritó en más de una vez.
El primer tiempo fue muy aburrido, prácticamente sin situaciones de peligro.
El argentino Franco, que apareció como delantero de área en su debut luego de que Diego Forlán lo sumara al plantel, no tuvo una sola oportunidad en el poco tiempo que estuvo en cancha. Es que, a los 20 minutos se metió en el área en velocidad y se sintió en el posterior del muslo derecho, por lo que tuvo que retirarse.
Por él ingresó el juvenil Agustín Álvarez Martínez, quien también debutó, y que le puso dinámica en el ataque, si bien tampoco tuvo muchas oportunidades, solo una destacada en el segundo tiempo, que se le fue por arriba.
Peñarol pudo quedar con 10 jugadores a los 35 minutos por una durísima entrada de Enzo Martínez que el juez Andrés Matonte resolvió con una amarilla, lo que hizo calentar los ánimos de Torque, que con un jugador de más podría haberle dado más efectividad a su tenencia, que esta vez no fue acompañada por juego ofensivo.
Olivera y Bravo, los extremos que eligió Saralegui para jugar por las bandas, casi que no lograron pasar al ataque y su trabajo consistió más que nada en cuidar sus sectores. Ambos fueron sustituidos en el entretiempo, al igual que Matías de los Santos, que tampoco trascendió.
Hay titulares y suplentes
En el segundo tiempo, Saralegui movió el banco y quedó claro que en su plantel hay titulares y suplentes.
Los ingresos de Cristian Rodríguez, Facundo Torres y Facundo Pellistri le dieron al equipo la dinámica que no había tenido en el arranque.
El Cebolla ingresó por detrás de Álvarez Martínez, a quien intentó asistir con pases en profundidad, mientras que Torres y Pellistri le pusieron velocidad y desborde por las bandas.
Fueron los mejores momentos de Peñarol, que pasó de tener dos tiros al arco en el primer tiempo, a cerrar el juego con nueve remates y haciendo que Mathías Cubero sea figura de Torque en el complemento, tras ingresar por el lesionado Cristopher Fiermarín.
Saralegui siguió en busca del gol y puso a David Terans, el goleador del equipo, quien tuvo un notable remate desde afuera del área que sacó Cubero.
Pero esa apuesta del DT hizo que el Cebolla pasara al doble cinco, lo que quitó el buen aporte que el capitán estaba haciendo más cerca del área.
Los minutos pasaban y Torque decidió cuidar el resultado. A diferencia de años anteriores cuando el equipo de Marini iba al ataque los 90 minutos, con los riesgos a lo que eso llevaba, esta vez la visita se concentró en evitar fallos e intentar con algún contragolpe.
A pesar del cambio de actitud, Peñarol no pudo llegar al gol y se fue con un empate, en un partido discreto, en el que quedó claro que los nueve cambios que realizó Saralegui no dieron resultado y que solo mejoró cuando metió mano de sus principales figuras.
Con el empate, el aurinegro quedó con 17 puntos, tres menos que Rentistas y Nacional, quienes juegan este domingo, cuando se complemente la fecha y queden tres etapas por disputar, más el pico de los “bichos colorados” ante River Plate.
Parece una distancia corta en un torneo tan irregular. Por eso, a los hinchas le costó entender que el técnico aurinegro hiciera tantos cambios, como restándole importancia al Apertura, y también a la Anual, para apostar por el partido del martes por la Copa, en el que, a pesar de lo de este sábado, Saralegui puede reivindicarse si obtiene un buen resultado ante Colo Colo, que pasa por un muy mal momento en el campeonato chileno.
El martes se sabrá si su apuesta fue buena.
