Ana Capurro, codirectora de la Unidad de Reproducción Humana del Hospital Pereira Rossell, participó de los dos embarazos de cuatrillizos en la institución. Uno fue hace 20 años y otro este miércoles, cuando nacieron tres niñas y un varón.
Los bebés fueron gestados mediante un tratamiento de reproducción asistida de baja complejidad, previsto en la ley 19.167 del año 2013 que regula las técnicas de reproducción.
En este tipo de tratamiento, la unión entre el óvulo y el espermatozoide se realiza dentro del aparato genital femenino, e incluye la inducción de la ovulación y la inseminación artificial.
El nacimiento de cuatro bebés es "atípico", según Capurro. La ley prevé que luego de la fertilización podrán transferirse al útero "solamente dos embriones por ciclo, por un máximo de tres ciclos, salvo expresa indicación médica, en que podrán transferirse un máximo de tres embriones" en tratamientos de alta complejidad.
La médica explicó que en todos los tratamientos, tanto de baja como de alta complejidad -como la fertilización in vitro, que se realiza en el exterior del útero-, se transfiere un embrión "o a lo sumo dos", que pueden dividirse.
"La división de un mismo embrión en dos genera el embarazo gemelar. La posibilidad de tener más embriones siempre está, si bien no es lo común", señaló.
En la Unidad de Reproducción del hospital, el tipo de embarazo más común es el de un solo embrión, aunque hay incidencia de mellizos (20%) y "algunas veces" embarazos triples.
Capurro explicó que los embarazos múltiples se producen, generalmente, en tratamientos de baja complejidad. "Ahí no dominamos la cantidad de embriones que se forman. Inseminamos cuando tenemos dos o tres folículos que van a dar dos o tres óvulos. Puede suceder que alguno se divida, entonces tenemos más embriones de los que pensábamos tener", sostuvo.
Cuando ocurre esta situación, los especialistas en reproducción proponen a la paciente una reducción embrionaria, lo que implica que uno de los embriones se reduce para que los demás evolucionen mejor, ya que los embarazos múltiples son más riesgosos.
En el caso de los últimos cuatrillizos del Pereira Rossell, Capurro explicó que la madre no quiso realizar la reducción. "Evolucionó con los cuatro, por suerte son niños con un peso aceptable".
Los bebés pesaron entre 1,1 y 1,7 kilos, se encuentran en buen estado de salud, y son atendidos por personal del CTI debido a que nacieron prematuros ya que el parto se efectuó cuando iban 32 semanas de embarazo.
La directora del Hospital, Victoria Lafluff, dijo en declaraciones a VTV que los bebés son hijos de una pareja de dos madres, y que la madre gestante está bien, recuperándose luego de la cesárea.
Por su parte, Capurro explicó que en la Unidad atienden tanto a parejas como a mujeres solas, y el tipo de tratamiento depende de la problemática de cada una.
"Tratamos a varias parejas femeninas, y si la que se va a embarazar está bien, empezamos con inseminaciones de semen de donante", comentó.
Los tratamientos de baja complejidad se realizan bajo ciertas condiciones. "Si la mujer tiene menos de 38 años, no tiene obstrucciones en las trompas de falopio, cuenta con una reserva ovárica adecuada y el semen no tiene alteraciones, empezamos con el tratamiento". De lo contrario, se debe realizar la reproducción de alta complejidad.
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