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Suman 67 en todo el mundo desde el inicio del año, 20 más que durante 2021
La Federación Internacional de Periodistas informó a pocos días de finalizar el año, que 67 periodistas murieron asesinados desde el 1° de enero pasado en todo el mundo en hechos relacionados con sus labores profesionales, número que representa 20 casos más que los registrados en las mismas circunstancias durante 2021.
La invasión de Rusia a Ucrania, el caos y ausencia del Estado en Haití así como el aumento de la violencia por parte de grupos criminales en México han contribuido al incremento señalado, según un nuevo informe de la Federación Internacional de Periodistas (FIP). El documento presisa que 12 de los trabajadores de prensa perdieron la vida en Ucrania, la mayoría de ellos ucranianos, pero también varios extranjeros.
El informe también retoma la denuncia de la cadena de noticias catarí Al Jazeera por el caso de la corresponsal estadounidense palestina Shireen Abu Akleh, quien murió el 11 de mayo pasado cuando las fuerzas israelís dispararon contra la periodista y un productor mientras cubrían una redada militar en un campo de refugiados en Jenin, en la Cisjordania ocupada, situación que la red Al Jazeera solicitó formalmente sea investigada por la Corte Penal Internacional.
El informe, publicado en vísperas del Día de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas, también muestra que “la represión política ha asomado su fea cabeza” en 2022. La FIP registró al menos 375 profesionales de los medios, 10 más que el año pasado, actualmente en prisión por hacer su trabajo, casos que en su mayoría se localizan en China, Myanmar, Turquía, Irán y Bielorrusia.
Con el número de trabajadores de los medios de comunicación asesinados en aumento, la FIP y otros grupos de derechos han reclamado a los gobiernos que tomen medidas más concretas para proteger a los periodistas y la libertad de prensa.
“La falta de acción solo envalentonará a aquellos que buscan suprimir el libre flujo de información y socavará la capacidad de las personas para hacer que sus líderes rindan cuentas, incluso para garantizar que quienes tienen poder e influencia no se interpongan en el camino de una comunicación abierta e inclusiva”, dijo el secretario general de la FIP, Anthony Bellanger, en un comunicado.
La FIP agregó que “el gobierno del terror de las organizaciones criminales en México y la ruptura de la ley y el orden en Haití también han contribuido al aumento de los asesinatos” y que 2022 ha sido uno de los más mortíferos para los periodistas que trabajan en México, país que ahora es considerado el peligroso para los reporteros fuera de una zona de guerra.
La FIP, con sede en Bruselas, que representa a 600.000 profesionales sindicalizados y asociaciones de más de 140 países, también registró la muerte de cinco periodistas en medio de la crisis política de este año en Pakistán. La organización, además, advirtió sobre nuevas amenazas se ciernen sobre los periodistas en Colombia y el peligro continuo para los periodistas en Filipinas, a pesar del nuevo liderazgo político que exhibe el país.
