Van 19 femicidios cometidos entre enero y el 30 de noviembre de este año y ONU Mujeres, el Instituto Nacional de Mujeres del Mides (Inmujeres) y la Red Uruguaya contra la Violencia Doméstica y Sexual declararon el 4 de diciembre como día de duelo nacional. La consigna definió a este miércoles como "un día para reflexionar sobre lo que no debió pasar".
Aquí, un recuento de la mayoría de los casos que se conocieron.
Fue el 30 de enero de este año. Jaqueline tenía 37 años y era cubana. Había llegado a Uruguay hacía poco más de tres meses, junto con su pareja. El hombre, de 51 años, la estranguló hasta asesinarla. Fue en Paso de la Arena, Montevideo. El yerno del femicida recibió esa tarde un mensaje de texto que decía: "Luis, agarré a Jaqueline por el pelo y la maté".
Tres días después del primer femicidio del año, una pareja, los dos de 60 años, apareció colgada. Que haya sido un femicidio y un posterior suicidio del hombre era una hipótesis que se basaba en "la forma" en que estaban colgados los cuerpos, según la fiscal del caso. Tenían dos hijos, un hombre y una mujer.
Rosana Batista tenía 29 años y trabajaba en la Jefatura de Artigas como policía. El hombre de 39 años con el que estuvo casada durante 15 años, y con el que tenía dos hijos de ocho y diez años, la asesinó. Antes, Batista lo había denunciado.
El 5 de marzo de este año la agente policial fue encontrada muerta en su vivienda ubicada en las afueras de la ciudad de Artigas. El hombre estaba muerto en otra habitación de la casa.
Diecisiete años tenía la adolescente cuando su pareja, un hombre de 42 años, la asesinó en su vivienda ubicada en Ciudad del Plata, San José. Fue el 29 de mayo de este año.
El hombre quiso hacer creer a la policía que había sido un suicidio, pero la joven tenía dos disparos en la cabeza, un elemento bastante claro que lo delató.
Amparo Fernández, oriunda de Paysandú, tenía 36 años y era enfermera de salud pública cuando fue asesinada y su cuerpo arrojado al río Yi, en Florida.
La mujer había desaparecido, pero su femicida confesó que había tirado su cuerpo al río tras “un accidente” a fines de junio de este año.
Anna Clara Da Silva tenía 4 años cuando su padrastro, un hombre de 31 años, le dio una golpiza que la mató. Fue en julio de este año en Rivera.
El padre de la niña había denunciado ante Fiscalía que su hija sufría maltrato por parte de su padrastro.
Un hombre de 51 años asesinó a su expareja en agosto de este año tras bajar la llave de luz de la casa de la víctima para que saliera de la vivienda a ver qué había pasado. La mujer, que en ese momento se encontraba con su actual pareja, fue asesinada por una puñalada en el cuello.
El femicida también mató a la pareja de la víctima.
Al otro día el hermano de la mujer vio que estaba abierto el portón del jardín, ingresó a la vivienda y vio los cuerpos de ambos sentados en un sillón.
La víctima tenía 47 años y vivía en el barrio San Miguel, en Artigas. El femicida, de 51 años, la apuñaló y luego a atropelló en la vía pública.
Ya existían denuncias previas por violencia de género.
Esmeralda Ferraz tenía 14 años. Había desaparecido el 30 de agosto en Tacuarembó, pero fue encontrada muerta en la madrugada del miércoles 4 de setiembre. El cuerpo fue encontrado a 300 metros de su casa.
El femicida fue el tío de la víctima, de 31 años, quien confesó a la policía haber cometido el crimen. La violó, ella se resistió y para evitar el ataque lo arañó y además rompió un espejo para defenderse. El hombre, luego de estrangularla, se llevó el cuerpo y lo enterró cerca de la casa.
Luciana Bentancur era odontóloga, tenía 35 años y un hijo de casi 3 años. Trabajaba como dentista en Castellanos, localidad de Canelones, y estaba separada del padre del niño.
La última comunicación que había tenido la víctima había sido un mensaje enviado por Whatsapp alrededor de las 21 horas.
Aún no se sabe quién fue el femicida.
La víctima tenía 49 años y su esposo la mató después de golpearla con un objeto, en La Macana, Florida.
El hombre, de 53 años, concurrió a la seccional 7° de San Fernando esa mañana y confesó el crimen.
Lorena Carrasco, una joven de 19 años, fue encontrada muerta en la zona de la Laguna Merín, en Cerro Largo, tras haber desaparecido junto con su pareja.
La víctima tenía dos hijas de tres y cuatro años. Las dejó en el jardín de infantes de la ciudad de Río Branco y no volvió a buscarlas.
Su pareja la estranguló hasta matarla.
A principios de octubre de este año un hombre asesinó a su expareja de varios disparos luego de romper dos veces una tobillera. La mujer tenía 4 hijos.
En Mendoza Chico, Florida, sucedió otro femicidio. La víctima, de 20 años, fue asesinada por su pareja de 22 años, quien luego se suicidó.
La principal hipótesis es que la mujer murió luego del golpe en la cabeza que le dio su pareja, ya que el cadáver presentaba una "lesión importante en el cráneo".
Eran pareja hacía 4 años y no había antecedentes por violencia doméstica.
Una mujer de 27 años, que tenía dos hijos de cuatro y seis años, fue asesinada por su pareja, padre de los dos niños y de 52 años. Fue en noviembre de este año en Pajas Blancas. La mujer recibió dos disparos de escopeta.
El hombre luego se suicidó.
Los niños estaban durmiendo en otro dormitorio de la casa.
Este domingo 30 de noviembre ocurrió el último crimen en lo que va del año en Paysandú. Un hombre, de 46 años, mató a su esposa de 44 años y luego se suicidó. La mujer fue encontrada en el dormitorio, con varios disparos de escopeta.
La pareja tenía tres hijos de 24, 18 y 10 años.
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