Vigilancia colectiva: crece la demanda y oferta de servicios de seguridad privada

Primero surgieron grupos de WhatsApp bajo el nombre "Vecinos en alerta" para notificar a sus integrantes de intentos o hurtos y/o rapiñas concretados en ciertas manzanas de un barrio y, como el nombre del grupo indica, estuvieran alertas para denunciar a la policía.

Como eso no revirtió la sensación de inseguridad, algunos grupos comenzaron a organizarse y evaluar alternativas de seguridad privada. Este es el caso de una agrupación de vecinos del Prado en Montevideo, que analizan contratar a un expolicía retirado que tiene su propia empresa de seguridad unipersonal. La propuesta -que aún está en debate- consiste en que el guardia trabaje en la noche, entre las 22 y las 6 horas, en una garita que se instalaría en una de las casas, lo que también implica colocar un baño químico, además de pagar un seguro y otros gastos asociados a su actividad.

La modalidad del servicio que se está evaluando es a través de un contrato de adhesión con los vecinos que ven positiva la idea de contar con una persona que esté pendiente de lo que sucede en la zona.

"Esta es una respuesta de los vecinos a la falta de patrullaje de la Policía", dijo a El Observador Leonel Martínez, uno de los referentes de la Coordinadora Nacional de Comisiones de Seguridad Barrial, que vive en el Prado y narró la idea que se conversó en una de las reuniones de vecinos desde donde surgió la propuesta.

Aunque el objetivo de contratar a un sereno no anula la necesidad de patrullaje en la zona -la potestad de esta actividad recae totalmente en el Estado a través de la Policía Nacional-, es una opción para "hacer algo para mejorar la seguridad", tal como explicó Martínez.

El vecino del Prado aseguró que en otros barrios de Montevideo se está analizando implementar soluciones similares, o instalar cámaras de seguridad para el perímetro exterior de una vivienda. Aunque dijo que no es una solución para todas las zonas. "Hay muchas personas que están consultando a empresas privadas, para casas y edificios. Pero es costoso. Los barrios que más necesitan seguridad son los que menos pueden pagarla", sostuvo.

De todas formas, las empresas de seguridad privadas incrementaron la demanda por servicios de seguridad en casas o edificios, fundamentalmente en el último semestre.

El decreto 275/999 del año 1999 establece que el Poder Ejecutivo es el encargado de reglamentar todo lo relacionado con las empresas prestadoras de servicios de seguridad, vigilancia y afines, así como las condiciones de su personal, equipos, sanciones a aplicar, revocaciones de permisos y condiciones de funcionamiento.

La actividad de estas empresas debe limitarse al ámbito privado -domiciliario o empresarial- y salvo el traslado de valores, el patrullaje en la vía pública no está permitido. Sin embargo, puertas adentro de un edificio o vivienda, la seguridad privada tiene su nicho cada vez más fuerte.

El director de Sigma Seguridad, Ruy Rodríguez, dijo que el negocio de seguridad domiciliario creció 50% en un año, aunque en el caso de la demanda de servicios en su compañía, se centró mayoritariamente en la seguridad de edificios en forma tradicional: porteros asistidos por alarmas y sistemas de circuitos cerrados de televisión. Aunque actualmente hay sistemas de porteros a distancia a través de un centro de monitoreo que atiende muchos edificios simultáneamente, Rodríguez entiende que esto "no resuelve múltiples problemas de los que normalmente se encarga un portero, es decir la atención de algunos servicios y demás necesidades del edificio".

En tanto, desde la compañía G4S se informó que lo más solicitado para la seguridad vecinal es el servicio de monitoreo y respuesta a las alarmas. La gerenta general de la compañía, Sandra Rodríguez también confirmó el aumento de la demanda. "La problemática vigente de la seguridad ciudadana ha llevado a la población a buscar protección y soluciones integrales de seguridad privada". Los barrios de Montevideo que más contratan estos servicios son Carrasco, Malvín y Prado. A su vez, en el interior del país se destacan Maldonado, parte de Canelones, Salto y Colonia como los departamentos más urgidos de soluciones en seguridad y vigilancia.

La percepción y el mercado está más dispuesto a la inversión en seguridad, según el gerente de Hogares y Pymes de Securitas, Maximiliano Viera. Al incorporar tecnología en los procesos, por ejemplo con la video portería remota o la video vigilancia, se reducen los costos para la empresa y para los clientes, dijo Viera. Por esta razón, aumenta la demanda.

"En edificios lo más demandado es la video portería remota, independientemente de que cada uno de los apartamentos tenga su propio sistema de seguridad. Esa solución es colectiva, se contrata entre todos", añadió. El gerente explicó cómo funciona el sistema. "Tiene cuatro cámaras que se colocan en distintos puntos del edificio y que son controladas por un operador de video portería remoto". Además, quienes ingresan y egresan del edificio pueden interactuar con la pantalla y ponerse en contacto con el operador que trabaja de forma remota, de acuerdo a lo establecido previamente en el diseño del sistema de seguridad.

"Permite el control del perímetro exterior con cámaras exteriores, y en las zonas comunes del edificio. Informamos de posibles riesgos de actos delictivos, y tenemos la posibilidad de incorporar sensores anti escalamiento, que es una modalidad de robo común en edificios", informó Martínez.

El denominado Ojo del Halcón es el sistema de video vigilancia desarrollado por Prosegur, que integra audio y video interactivos, monitoreado desde la Central Receptora de Alarmas de la compañía. Desde la dirección de Prosegur señalaron que el concepto de seguridad inteligente, con el cual se diseñan estas soluciones, vincula tecnología con el capital humano. "Como ejemplo, se puede citar el servicio de alarma con video verificación que avanza hacia la interconexión digital mediante internet para la gestión de hogares y empresas con domótica (sistema de automatización)". A través de una aplicación, quien contrata el servicio puede gestionar la alarma de forma sencilla, indicaron desde la empresa.

El concepto que se reitera para la contratación de seguridad privada en los hogares es la disuasión y prevención.

En este sentido, Rodríguez de G4S indicó que las residencias están requiriendo la concurrencia aleatoria y disuasivo-preventiva a través del servicio G4S Stop and Go, que requiere la presencia física del personal de la empresa a través de móviles de apoyo en los sitios contratados. "Este nuevo proyecto ha permitido desalentar significativamente el delito en los inmuebles o barrios, donde la presencia de nuestros vehículos da lugar a una rápida verificación de los posibles actos delictivos y el correspondiente llamado a las autoridades policiales", recalcó.

Por su parte, el gerente de Securitas dijo que la empresa, a pedido de la demanda, busca reemplazar el concepto de seguridad tradicional por el de protección. "Para diseñar una solución de protección, se hace un análisis previo de riesgos, elaborando una especie de traje a medida para cada cliente. Ahí se contempla la integración de los sistemas de alarmas de intrusión, control de acceso, junto con las soluciones de detección, control de incendios y otras variables", resumió.

Otro de los productos que ya están en el mercado referido a la disuasión es la niebla anti hurto, un sistema desarrollado por Securitas. "Es un sistema de alta tecnología que en unos segundos es capaz de anular la visión al 100% al ingresar a un lugar. Es un dispositivo que al detectar un evento o intrusión, comienza a liberar niebla", explicó Viera, y agregó que actúa como un elemento disuasorio, "evitando el hurto".