El hábito de mantener el teléfono celular en silencio puede parecer una simple elección, pero varios estudios sugieren que podría estar vinculado a ciertos rasgos de la personalidad. Según psicólogos, las personas que prefieren no recibir notificaciones audibles suelen ser más propensas a valorar la tranquilidad y a establecer límites claros en sus relaciones y entornos.
Investigaciones publicadas recientemente en la Journal of Environmental Psychology indican que aquellos que activan el modo silencioso en su teléfono lo hacen no solo para evitar distracciones, sino también como un reflejo de la forma en que gestionan su tiempo y espacio personal. Esta conducta puede ser vista como una señal de control sobre la propia vida, en un mundo donde las notificaciones constantes generan estrés y ansiedad (Fuente: Journal of Environmental Psychology, vol. 81, 2023).
Desde una perspectiva psicológica, el silencio en los dispositivos podría vincularse a la necesidad de evitar el "ruido" digital y enfocarse en las prioridades personales. “Las notificaciones constantes crean una presión por estar disponibles todo el tiempo. Al silenciar el teléfono, se disminuye esa presión, lo que genera una mayor sensación de autonomía”, explica la doctora Julia Stevens, especialista en psicología digital.
¿Control o ansiedad?
Los especialistas también destacan que esta conducta puede estar relacionada con la gestión de la ansiedad. Al optar por silenciar las notificaciones, las personas reducen una fuente importante de estrés: la expectativa de tener que responder de inmediato. Esta práctica contribuye a un mejor equilibrio entre lo digital y lo personal.
No obstante, no todos se sienten cómodos con el teléfono en silencio. Hay quienes experimentan lo contrario: miedo a perderse algo importante, fenómeno conocido como FOMO (Fear of Missing Out). Estos usuarios prefieren mantenerse conectados y disponibles en todo momento, lo que también refleja ciertos aspectos de su personalidad, como la necesidad de estar constantemente al tanto de lo que ocurre en su entorno.
El valor de establecer límites
La Universidad de Stanford ha señalado en varios de sus estudios la importancia de los límites en la era digital. Mantener el teléfono en modo silencioso es una forma eficaz de establecer barreras entre el mundo exterior y el tiempo personal. "Es un acto que permite a las personas gestionar mejor su atención y su salud mental en un entorno hiperconectado", asegura el informe.
Para muchos, el modo silencio no solo es una herramienta práctica, sino un reflejo de cómo prefieren interactuar con el mundo. Al no estar sujetos al constante zumbido de notificaciones, quienes lo practican tienden a sentirse más en control de su vida diaria, algo que, según los expertos, resulta esencial en la era de la información.
En definitiva, aunque pueda parecer una elección pequeña, mantener el teléfono en silencio puede decir mucho sobre nuestra personalidad. En un entorno de hiperconectividad, el silencio del dispositivo puede ser un respiro necesario para aquellos que buscan paz y control en medio del caos digital.