La síndico Zamira Ayul a cargo del proceso concursal necesario de República Ganadera –uno de los “fondos ganaderos” que dejó de pagar a sus inversores– presentó a la Justicia el informe de verificación de créditos de la empresa dirigida por Nicolás Jasidakis y Mauricio Mussio, quienes están siendo investigado también penalmente por el fiscal de Delitos Económicos Enrique Rodríguez.
De acuerdo con el documento, al que tuvo acceso El Observador, la sindicatura logró comprobar que República Ganadera mantiene un pasivo de US$ 95.575.945 contra un activo de US$ 12.776.744.
En total, Ayul verificó los créditos de 1.445 personas a quienes dejaron de pagar desde hace varios meses cuando la compañía se presentó en quiebra. Entre las personas que aparecen en la lista, hay seis con el apellido Jasidakis, así como la esposa de Nicolás Jasidakis, Elina Fynn.
El activo, en tanto, se compone de animales que quedaron en propiedad de República Ganadera, pese a que en el recuento existió una diferencia entre los declarado por la empresa y lo que encontró la sindicatura.
El informe sostiene que la empresa mantiene 19.271 vacunos por un valor de US$ 10.020.920, sumado a US$ 803.205 que corresponden a 12.357 ovinos y 271 equinos valuados en US$ 108.400. De estos animales, no está claro cuántos son de República Ganadera y cuántos están a nombre de los inversores.
El ganado, en líneas generales, está en buen estado sanitario aunque se encontró un solo campo donde hay riesgo de vida. “La garrapata está controlada en la gran mayoría de los campos, lo que no quita que sea un problema, hay brotes esporádicos de tristeza, donde algún animal adulto muere. El tratamiento conlleva tiempo, trabajo y dinero”, añade el informe.
Los terneros se encuentran al pie de la madre y se debería valorar el destete, aconseja el texto elaborado por el escritorio Urchitano Negocios Rurales y que fue incluido en el informe de Ayul. Agrega que la recomendación busca “contribuir al bienestar de las madres en los meses venideros”.
En tanto, hay 3.000 animales que figuran en el inventario hecho por Ayul pero se vendieron y el correspondiente valor ya está en una cuenta a la que tiene acceso la sindicatura.
Además, se hallaron inmuebles como uno en la calle Eduardo Couture en Carrasco donde funcionaba la oficina de República Ganadera. El texto especifica que la empresa compró el bien siendo una vivienda y lo refaccionó para instalar su actividad comercial allí. Este fue valuado por US$ 630.000 de acuerdo con el documento.
Otro inmueble, también de la empresa, ubicado en Artigas. Antes funcionaba como una casa y luego fue adaptado para oficinas. La edificación está valuada en US$ 200.000, de acuerdo con el informe de Ayul.
El activo se conforma también de maquinaria rural, varios autos de la empresa y los muebles que estaban en las oficinas. El total de esto suma US$ 285.019, según el informe.