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¿Naranja, amarillo o verde? Dónde está parado Uruguay tras pico de casos de covid-19
Este miércoles se registró un nuevo pico en la cantidad de casos nuevos de covid-19 (51) y de casos activos (330), principalmente debido a un nuevo brote en un residencial de adultos mayores y un foco en el sanatorio Casmu, por el que hay 100 funcionarios en cuarentena. Alicia Cardozo, infectóloga y profesora grado 4 en la Facultad de Medicina, dijo a El Observador que los 51 casos detectados es “una cifra que nos preocupa a todos” y que representa “una especie de semáforo amarillo, naranja casi rojo”. “Creo que es un llamado de atención”, resumió.
Si bien para Carozo esta situación puntual debe alarmar a todos, también “hay que tomar lo que está ocurriendo ya desde hace algunos días, que no estamos bajando de entre los 25 y 30 casos por lo menos”. Esta infectóloga aclaró que más allá de que sea entendible que “la gente esté un poco harta” después de siete meses de haber comenzado la pandemia –algo que se percibe en “un afloje general” de la población– hay que “tomar consciencia” porque de lo contrario “se nos puede complicar mal”. “Y si se nos complica mal, vamos a terminar como Argentina, Brasil, Europa y como cualquiera de los otros países del mundo”, sostuvo.
Quien también se expresó en ese sentido fue Julio Vignolo, epidemiólogo e integrante del comité de crisis del Ministerio de Salud Pública (MSP). Según declaró a El Observador, la cantidad de casos nuevos registrados "supone un crecimiento importante en relación a lo veníamos teniendo" y que "hay una mayor laxitud social", por lo que se deben reforzar los controles y asegurar el cumplimiento de protocolos. Para Vignolo esta situación "es un llamado de atención" y, en la misma línea que Cardozo, puntualizó que "esto es un semáforo amarillo", a pesar de que la situación epidemiológica "está bajo control". "Para que se salga de control la situación tiene que haber más de 100 casos por día", recordó.
En tanto, Carlos Batthyány, director ejecutivo del Institut Pasteur, declaró a Arriba Gente que la cifra récord de casos registrada ayer no altera su visión de que se debería incrementar la presencialidad en los centros educativos. "Mantengo la misma opinión, no por terco, sino basado en evidencia, en datos, en las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud y de las mejores revistas científicas", señaló. Además, aclaró que Uruguay está "sumamente bien en el porcentaje de tests positivos por tests realizados" porque "ayer, por primera vez pasamos la barrera del 1%" y ya que la cantidad de nuevos casos en los últimos 14 días cada 100 mil habitantes "Uruguay está en 9 (riesgo bajo)". "Uruguay está en una zona segura, estamos bien", afirmó.
Para eso ejemplificó un "semáforo" utilizado por la Unión Europea para medir la situación de cada país, que fue tuiteado por el científico, Óscar Ventura.
“Hay dos variables que se toman en cuenta: uno es el porcentaje de caso positivos en el día, y en el otro eje es la incidencia acumulada cada 100 habitantes en los últimos 14 días. Tiene una zona verde, amarilla y roja. Uruguay en los dos ejes está sumamente bien. En el eje de tests positivos por tests realizados, ayer por primera vez pasamos la barrera del 1% (llegó al 2%), y el verde llega hasta el 4%. Estamos muy bien. En la otra el verde (casos cada 100 mil habitantes en los últimos 14 días) llega hasta 25, y nosotros estamos en 9. O sea que Uruguay está en una zona bien segura, estamos muy bien. Lo que no quiere decir que vayamos a seguir estando bien, sino que estamos haciendo las cosas bien”.
Además, el director del Pasteur dio más detalles: “Hoy de mañana salió un trabajo en la revista Lancet, en el que hay un consenso de científicos sobre lo hecho en estos nueve meses y terminan diciendo que no se puede hacer lo de Europa, de ir a buscar la inmunidad de rebaño, dejando que la gente vaya a la playa de forma libre y sin cuidados, porque eso llevó un caos, y recuerdan que lo que hay que hacer es lo que hizo Uruguay desde el primer día: testear mucho, rastrear a los positivos y aislarlos lo antes posible. En ese marco, según como estamos epidemiológicamente, que estamos en la zona de máxima seguridad, con la capacidad de diagnóstico instalada, más la capacidad que estamos instalando, creo que Uruguay está muy bien”.
Cardozo dijo que, de todas maneras, no cree que sea necesario “que nos prohíban hacer cosas para entender”. “Me resisto a pensar que me tienen que prohibir (hacer cosas). Si somos un pueblo que necesita que le digan qué es lo que tiene que hacer prohibiéndole, no entendimos nada”, manifestó. En ese sentido, mencionó la Marcha del Silencio virtual que se realizó en plena pandemia, el 20 de mayo, y en la que se utilizó “una forma alternativa que fue muy efectiva”.
La infectóloga dijo, en referencia a las últimas marchas multitudinarias, que “todos tenemos derecho a manifestarnos y manifestar el descontento y lo que fuere, pero tal vez haya que buscar formas alternativas porque lo que está en juego es más grande porque si esto se desmadra, que esperemos que no, no reconoce después si es que no fuiste a la marcha o sí fuiste”. Además, ejemplificó la gravedad que significaría que la gente no tomara una actitud responsable, y las consecuencias que eso podría tener en la capacidad del sistema de salud de auxiliar a la gente: “¡Si infartás no vas a tener donde internarte! Incluso si te accidentas en la ruta no vas a tener lugar para internarte”.
La clave para que la situación sanitaria se mantenga controlada y para que no aumente la cantidad de personas internadas es, para Cardozo, “el distanciamiento físico sostenido, el tapabocas, que es fundamental y el lavado de manos frecuente”. “Quiero pensar que hay un foco puntual. Creo que podemos seguir en esos 30 promedio. Quizás no está del todo bien, pero es bastante sostenible. Esperemos que volvamos a los 30 (diarios)”, sentenció.
