A días de que comience la venta, peligra acceso a marihuana legal en el interior

A pocos días de que llegue julio, mes previsto para que inicie la venta de marihuana legal en farmacias, la cadena San Roque, que iba a aportar casi la mitad de los 30 puntos de ventas previstos por el gobierno, principalmente en el interior, todavía no firmó un contrato para hacerlo, y las compañías que se encargan de la producción y distribución no tienen aún un cronograma establecido para comenzar a entregar el producto.

A ello se suma que, debido a la falta de información sobre cómo se distribuyen territorialmente las más de 4.200 personas inscriptas en el registros de adquirentes, los empresarios "no ven la rentabilidad al negocio", dijo a El Observador el presidente de la Asociación de Farmacias del Interior (AFI), Fermín Arguiñarena. Agregó que eso dejaría a varias capitales departamentales sin oferta.

En una reunión que mantuvieron las autoridades de AFI hace dos semanas con representantes del Instituto de Regulación Control del Cannabis (Ircca) la cifra de 30 farmacias participantes ya se ajustó a la baja, cuando desde el instituto regulador se informó que hasta el momento había unas 20 farmacias inscriptas para comenzar a vender, al tiempo que unas 40 más están en trámite para hacerlo. El Observador intentó consultar al Ircca y a la Junta Nacional de Drogas, pero se negaron a dar declaraciones.

En tanto, en una nota publicada por Presidencia el pasado 9 de junio, el secretario general de la Junta Nacional de Drogas, Diego Olivera, dijo que la venta en farmacias comenzará en la primera quincena de julio, y afirmó que se están sumando más farmacias dispuestas a vender cannabis, aunque no precisó cifras. "Estamos conformes con el desarrollo del proceso", afirmó.

En abril, el prosecretario de la Presidencia, Juan Andrés Roballo había dicho que serían 30 las farmacias que comenzarían a vender marihuana en julio, de las cuales 14 serían locales de San Roque del interior del país. Sin embargo, el gerente general de la cadena, Martín Álvarez, dijo a El Observador que debido a la falta de elementos concretos no se llegó a firmar un acuerdo, y que el único contrato al que tuvieron acceso fue un borrador que les fue entregado hace un año. "Hasta ahora no hemos visto nada concreto, no hay un cronograma, no sabemos cómo se va a preparar a la gente que va a vender", aseguró.

Además, Álvarez dijo que la baja cantidad de personas inscriptas en el registro de adquirentes, hace inviable un negocio que "no genera ganancia". "Tenemos que evaluar el tema porque no queremos meternos en un problema. Para nosotros es una forma de ayudar porque no hay ningún beneficio de ningún tipo", agregó.

Según explicó, cuando el gobierno le propuso a San Roque comenzar a vender en locales del interior, representantes del IRCCA dijeron que serían 60 mil las personas que estarían inscriptas para cuando comience la venta, algo que no ocurrió. "Si tenemos 5.000 posibles clientes diseminados por todo el país, y la mayoría ellos estaría en Montevideo, tendríamos apenas unos 10 o 20 clientes por mes en el interior, lo que de ninguna manera es negocio", explicó.

Según establece la ley, cada consumidor podrá adquirir hasta 40 gramos por mes (10 gramos por semana). El precio de cada gramo es de US$ 1,30, de los cuales US$ 0,90 corresponderá para la empresa productora, y el resto se reparte entre la ganancia de la farmacia y lo que recaudará el Ircca. Álvarez dijo que el margen que se obtiene de la venta de cada gramo solo bastaría para cubrir los costos asociados a la comercialización de este producto, como por ejemplo la seguridad especial que a su juicio requerirían estos locales.

Este punto también preocupa a las farmacias tradicionales del interior, según dijo el presidente de la institución que las agrupa. Arguiñarena contó que al principio habían unas 50 farmacias en el interior dispuestas a vender marihuana, pero a raíz del temor a sufrir asaltos la mayoría de los empresarios "comenzó a retraerse".

Sin embargo, es la falta de información el principal escollo para que los empresarios se lancen a vender cannabis, explicó el presidente de AFI. Es que según Arguiñarena, no existe información que les permita saber si tienen potenciales clientes cerca de sus locales, por lo que "no pueden invertir US$ 1.000 en un kilo de marihuana que después no saben si van a poder vender".

De todos modos, el presidente de AFI dijo que en la medida en que haya más información y más personas se inscriban, es probable que los empresarios comiencen a vender marihuana legal.

Según la información que maneja Alejandro Antalich, vicepresidente del Centro de Farmacias, que nuclea a las de Montevideo, la venta comenzará entre el 10 y el 31 de julio. Explicó que hasta ahora el Ircca mantiene un trato directo con las farmacias que adhirieron a vender marihuana al tiempo que está prevista una reunión con socios de esta agrupación que todavía no tiene fecha establecida.

En tanto, según supo El Observador, las dos empresas que tienen la licencia para la producción y distribución de marihuana legal, Icorp y Simbiosys, ya están prontas para comenzar la venta, pero todavía desconocen la lista de farmacias a las que le venderán, ni tienen una fecha clara para comenzar a hacerlo. Las propias empresas serán las encargadas de entregar la marihuana a las farmacias.

Fuentes de las empresas señalaron que dado la poca cantidad de compradores que se han inscripto hasta ahora, consideran que terminarán perdiendo dinero con la venta de esta droga con fines recreativos.