Los planteles de Peñarol y Nacional no pueden a concentrar para el clásico de este miércoles a la hora 18:30 en el Campeón del Siglo, por la cuarta fecha del Torneo Clausura, por lo que será otra de las situaciones novedosas que tendrá el partido debido a la pandemia de covid-19.
El Ministerio de Salud Pública (MSP) elaboró un protocolo sanitario que se puso en práctica este año con el inicio del Clausura y que cambió la forma en que se desarrollaban los partidos de fútbol en Uruguay. Entre varios puntos a tener en cuenta, no se permite la concentración de grupos de personas.
En tiempos de normalidad sanitaria los jugadores concentraban uno o dos días antes del clásico, algunos entrenadores solían mostrar videos motivacionales antes de salir hacia el estadio y el ómnibus que trasladaba a los jugadores era saludado por los hinchas que se juntaban en las veredas. Nada de eso sucederá en esta oportunidad.
De acuerdo a lo que se informó a Referí, los aurinegros se reunirán en Los Aromos para salir luego al estadio, tal como lo hacen siempre, y los tricolores se reunirán por la tarde en Los Céspedes para cerrar el trabajo previo al partido y luego trasladarse en dos ómnibus.
La concentración antes de partidos importantes es una costumbre arraigada en el fútbol uruguayo y que solo se ha roto en los últimos tiempos por medidas tomadas por los jugadores. Por ejemplo, en mayo de 2011 los tricolores decidieron no concentrar antes de enfrentar a Peñarol por el Clausura por promesas de pago incumplidas por los dirigentes y luego ganaron 1-0 con gol de Santiago García.
En el clásico del Apertura, en agosto del año pasado, el técnico de Nacional, Gustavo Munúa,concentró a 22 jugadores y el de Peñarol, Diego Forlán, a 21. Fue el primero que se jugó sin público.
Nacional era local y vendió 15 mil entradas simbólicas y con las fotos de los compradores decoró la Colombes y también la Olímpica con la frase “Decano 1 solo”.
En el de diciembre pasado por el Intermedio, los planteles también concentraron. Peñarol lo hizo en Los Aromos y su técnico, Mario Saralegui, había invitado a Carlos Bueno, pero el Consejo Directivo se opuso a su presencia.
Ese partido se disputó en el Campeón del Siglo sin gente, pero en aquella oportunidad la televisión mostró en las tribunas un grupo de hinchas aurinegros, lo que derivó en una multa de 150 unidades reajustables (US$ 4.500) para Peñarol.
Entre los puntos más importantes del documento que fue elaborado por el MSP y presentado a la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) se encuentra la eliminación de las concentraciones y aquellos equipos que quisieran concentrar deberían seguir los requisitos de la burbuja sanitaria de las copas internacionales, algo que es costoso y que en el caso de Nacional terminó en un escándalo a fines del año pasado.
Los vestuarios solo se podrán utilizar para que los equipos se vistan y de uso sanitario. Se prohíbe el uso de las duchas y de charlas técnicas en los vestuarios. Los entrenadores suelen utilizar las tribunas o un costado del campo de juego para brindar sus charlas a los futbolistas.
La forma de transportarse al escenario también cambió y, generalmente, se hace en dos ómnibus, ya que no pueden viajar más de 25 personas por vehículo.
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