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Brasil seguirá demandando un alto volumen de trigo
Brasil seguiría siendo un firme demandante de trigo en la campaña agrícola 2019/2020, según las estimaciones del gobierno de ese país y del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA).
Recién se está cerrando la siembra en el polo triguero del sur de Brasil, aunque los últimos episodios de heladas pudieron afectar los cultivos más adelantados en el estado de Paraná, uno de los dos principales productores.
La Compañía Nacional de Abastecimiento (Conab), en su reporte mensual de julio, corrigió marginalmente al alza su estimación sobre la cosecha brasileña de trigo, a 5,488 millones de toneladas contra los 5,427 millones de toneladas del ciclo anterior.
En el informe mensual la Conab redujo en 200.000 toneladas –a 6,8 millones de toneladas– la estimación sobre las importaciones de trigo para el ciclo comercial 2018/2019.
Para la campaña 2019/2020 manejó un volumen de importaciones que alcanzaría los 7,2 millones de toneladas. El organismo prevé que los stocks al cierre de 2019/2020 sean los más bajos en los últimos cuatro años.
El USDA, en tanto, prevé una producción brasileña de trigo para 2019/2020 de 5,5 millones de toneladas, prácticamente sin cambios respecto al ciclo anterior.
Los técnicos del USDA en Brasil estimaron que las importaciones en 2019/2020 serían similares a las del ciclo anterior que todavía está en curso.
Uno de los puntos en cuestión es la aprobación del cupo de 750.000 toneladas de importación sin arancel de trigo proveniente de fuera del Mercosur reclamado por Estados Unidos. En su visita a Washington en marzo pasado, el presidente brasileño Jair Bolsonaro acordó implantar este cupo, aunque hasta ahora no se han dado avances.
Más allá del trigo estadounidense, hay fuerte interés de grandes exportadores rusos por colocar su producto en Brasil. En medios especializados se habla que podrían cerrar las ventas de algunos barcos de trigo ruso para Brasil para setiembre y octubre.
