Casa de Galicia: el descargo de Salinas tras el acuerdo con los trabajadores médicos

El jerarca dijo a El Observador que con estas declaraciones respondió a los médicos que criticaron el acuerdo por su inversión y la cantidad de trabajadores traspasados en las redes sociales "cuando siempre quedaron tirados". El jerarca destacó que "nunca el SMU (Sindicato Médico del Uruguay) acordó nada. Es la primera directiva que lo hace", en referencia al cierre de otras mutualistas.

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El acuerdo implica una inversión de $ 19 millones de las cápitas del Fondo Nacional de Salud (Fonasa) y la contratación de 250 trabajadores médicos entre las cinco mutualistas que recibieron a los exsocios de Casa de Galicia (Círculo Católico, Hospital Evangélico, Universal, Cudam y Crami). 

Salinas explicó que se trasladará a estos 250 trabajadores "en principio", y que pretenden trasladar a más médicos a los cinco prestadores, hasta que den los $ 19 millones. "La oferta inicial fue de 5 millones de pesos y se logró cuadruplicar", expresó en Twitter. "Nos jugamos mucho y hasta las empresas nos criticaron por eso", afirmó el jerarca.

El ministro puntualizó que varios de los médicos de la mutualista "se consiguieron trabajo", por lo que la base inicial de trabajadores se acortó, y detalló que el 40% de los empleados de este rubro estaban vinculados a "venta de servicios", por lo que no se los puede transferir "de un saque".

A esto Salinas suma que aquellas personas que no hayan sido empleadas por las empresas cobrarán un seguro de desempleo de 18 meses, los 12 acordados en las negociaciones y pactados en la ley que dio solución al cierre de Casa de Galicia, y los 6 meses legales previstos para todos los casos.

"Tampoco cuentan las ganadas. Hay 37 médicos trabajando aún en servicios de apoyo en el Sanatorio" de Casa de Galicia, agregó.

Salinas remarcó que "había médicos con siete trabajos y 2 horas semanales de policlínica" que "trabajan para el IRPF pero no razonan", y que se priorizaron "los grados de dependencia de dicho empleo y jefas de hogar". 

El acuerdo divide tres grupos de preferencia a la hora de las contrataciones: el primero engloba a los que tenían a Casa de Galicia como única fuente de ingreso, el grupo 2 a aquellos que obtuvieran el 60% de sus ingresos a través de este prestador y el tercero a quienes obtuvieran menos que ese porcentaje. El plazo máximo para la distribución de estos grupos es de 75 días.

El secretario de Estado también fue crítico con las protestas sobre los salarios, que tendrán un tope de $ 184.000 nominales mensuales, y en los casos que se supere el monto se reducirán las horas laborales hasta alcanzarlo, manteniendo al menos el 70% del trabajo y la remuneración. Para Salinas, esta situación se "socializó", porque "antes los que ganaban menos de 250.000 iban a cobrar 100% y los que cobraban más el 70%", y cree que los médicos no hablan de "los sueldos altos" porque "no les conviene hablar".

"Lo mejor es enemigo de lo bueno"

La presidenta del SMU, Zaida Arteta, aseguró que el sindicato no está "conforme" con el acuerdo alcanzado, en un comunicado publicado en la página del sindicato, consignado por Montevideo Portal. "Vimos como existe una postura política equivocada (que vaya una a saber que prioriza), que defiende el trabajo médico de baja carga horaria, baja dedicación, baja remuneración, multiempleo y por tanto menor calidad y mayor incertidumbre", criticó Arteta.

La gremialista indicó que hubo algunas "variables" que dificultaron las negociaciones, como "el breve lapso de tiempo de la negociación", que surgió "de una ley que no estableció un mínimo de trabajadores a distribuir, ni condiciones mínimas, como el respeto de los laudos, o la relación de dependencia para que se mantengan los derechos laborales básicos", en referencia a la ley votada en el Parlamento sobre la situación de Casa de Galicia.

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Por su parte, el secretario médico del SMU, José Minarrieta, criticó el tuit de Salinas con otra publicación en la red social, y dijo que "en la mesa de negociación quedó claro para todos que las cuentas no dan" lo que valoró el ministro. "Esos 19 (millones de pesos) al menos debieron ser 25 si se respetaban los números de los prestadores que absorbieron", declaró Minarrieta, y remarcó que deberían haber sido $ 38 millones si el sindicato hubiese querido "repetir el ratio de Casa de Galicia", aunque "nunca fue así".

Sin embargo, Arteta también valoró el "vaso medio lleno" de la situación, en la que "los colegas que dependen económicamente de Casa de Galicia tendrán en breve un trabajo y condiciones similares", y en la que prevén que "el número de personas que conservarán el trabajo si bien es incierto hoy, es altamente probable que supere esta cifra acordada como mínima".

Salinas indicó que la postura del SMU "es lógica", porque "siempre hay una posición de máxima", pero cree que la solución actual será "un caso de éxito en los próximos años", por tratarse del primer acuerdo que logra el sindicato ante el cierre de una mutualista. En este caso, el jerarca opinó que "lo mejor es enemigo de lo bueno".

"Hicimos todos los máximos esfuerzos. Jugamos fuerte para que los prestadores llegaran hasta donde llegaron", añadió el ministro.