La casa de Gran Hermano volvió a recibir jugadores. El pasado lunes comenzó la primera edición de Gran Hermano Chile y el programa de confinamiento se desarrolla en la misma casa que recibió a los "hermanitos" de la edición argentina.
Esta vez será el hogar de 18 participantes, 10 mujeres y 8 hombres, que estarán confinados durante 100 días y observados las 24 horas.
Según informó la producción del programa, el promedio de edad de los participantes es de 30 años: dos son menores de 20, 13 tienen entre 20 y 40, y tres son mayores de 40. En cuanto a su estado civil, 11 son solteros, tres están en pareja, dos están divorciados y dos están casados. Entre todos suman seis hijos.
Pero el comienzo de una nueva edición luego del éxito de la adaptación argentina trajo sorpresas, curiosidades y comparaciones con los exparticipantes de la casa más famosa de la región.
El caso más paradigmático es el de Mónica Ramos, quien rompió un récord para el formato internacional. La mujer de 77 años se convirtió en la participante más longeva de la historia del reality creado en 1999.
Mónica Ramos Mónica vive en La Florida, una comuna ubicada en la Región Metropolitana de Santiago de Chile, y según contó al entrar al programa es ama de casa, trabaja en ferias ambulantes y le gusta bailar tango. Con el pelo violeta, defendió su estilo y la decisión de participar del show: “Me siento bien, estoy conforme con lo que soy. Me gusta participar en esto porque es una oportunidad que no se da dos veces en la vida y menos a mi edad”.
Luego del ingreso de Ramos se vivió una situación que generó una polémica fuera de la casa. La conductora del programa, Diana Bolocco, convocó a todos los participantes para saludarlos: “¿Cómo están? ¡Qué gusto de saludarlos! Yo sé que la señora Mónica está durmiendo, no la despierten, pero el resto venga para acá para saludarlos”, dijo la conductora del ciclo. “Me gustaría que vengan todos, menos Mónica que no la vayan a despertar”, insistió.
El parecido de un participante a Alfa de Gran Hermano Argentina
El ingreso de los nuevos participantes llamó la atención de quienes siguieron la versión argentina, que encontraron parecidos entre los perfiles de los nuevos jugadores y los que compitieron en la edición que terminó con Marcos Ginocchio como ganador.
El primero que generó comentarios fue Francisco Arenas, un mecánico de 61 años que llegó a la casa con un estilo muy similar al que patentó durante el programa Walter "Alfa" Santiago: bandana en la cabeza, jean, colores neutros y prendas superpuestas.
“Decile a este personaje que ser Alfa es una manera de vivir, no es ponerse una bombacha en la cabeza, que encima está mal puesta y le tapa la mitad de las orejas”, dijo el exparticipante al ser invitado en el programa A la Barbarossa (Telefe).
Además dijo que los chilenos son una “copia” de quienes participaron de la última edición argentina. “Todos los que están ahí dentro se morfaron el minuto a minuto del argentino”, opinó.
Nacho Castañares, uno de los finalistas de la última versión argentina, también se refirió a los nuevos participantes en sus redes sociales y publicó una encuesta entre sus seguidores para que definieran si lo veían parecido a Hans Valdés, uno de los competidores más jóvenes de la casa.
“Pensar que hace 8 meses yo entraba por primera vez a esa casa. Siendo realmente el primer jugador que pisaba”, dijo el exparticipante.
También Julieta Poggio habló sobre el ingreso de nuevos competidores: “Se me hace muy raro verlo desde afuera y ver otras personas en la casa, me trae demasiados recuerdos de ese primer día, sensaciones y mucha nostalgia, quiero volver un ratito me parece. Qué locura y qué experiencia tan única es”.