Mientras termina una penosa temporada 2022, Peñarol encara la preparación del partido de la última fecha del Torneo Clausura (sábado, hora 19:00 contra Cerro Largo en el Ubilla de Melo) con la certeza de que ya está afuera de la Copa Libertadores 2023.
Esa eliminación se hará oficial la semana que viene cuando la Comisión Disciplinaria de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) dé por concluido el partido que Boston River le ganaba 2-1 a Peñarol el miércoles de la semana próxima cuando fue suspendido por incidentes perpetrados por hinchas de Peñarol en el Parque Viera.
Clasificar a la Copa Libertadores es clave en la economía de los equipos grandes del fútbol uruguayo.
Estos son los premios que se pagaron en la edición 2022 del evento.
Libertadores | US$ |
1ª fase | 400.000 |
2ª fase | 500.000 |
3ª fase | 600.000 |
Fase de grupos | 3.000.000 |
Nacional y Liverpool ya tienen US$ 3 millones asegurados en caja para 2023.
Si Peñarol lograba clasificar a la Libertadores en las fases previas al grupo (si era Uruguay 2 arrancaba en segunda fase y si era Uruguay 4 lo hacía en la primera) tenía la posibilidad de ir acumulando premios si lograba superar sus llaves de playoffs.
Ningún equipo uruguayo se metió en fase de grupos arrancando desde la primera fase. Nacional lo hizo comenzando en segunda fase, en 2017, con Alexander Medina de entrenador.
Peñarol ahora jugará la Copa Sudamericana. Ahí es segura la presencia de Danubio. Los dos que no clasifiquen a Libertadores irán también a ese torneo. Boston River y Deportivo Maldonado corren con ventaja para la última fecha.
Los premios en la Sudamericana son sensiblemente inferiores.
Sudamericana | US$ |
1ª fase | 225.000 |
Fase de grupos | 900.000 |
Los cuatro uruguayos clasificados a esta copa se eliminarán entre sí y los ganadores clasificarán a fase de grupos por un premio de US$ 900 mil, menos de la tercera parte de lo que se percibe por jugar el grupo de la Libertadores.
A fines de julio de este año, el presidente Ignacio Ruglio presentó un informe económico del club y durante el período de pases afirmó a viva voz por distintos medios que la economía del club le permitía salir al mercado para lograr refuerzos resonantes. Así llegó Brian Lozano -quien jugó un pobre Clausura- y después se ventilaron nombres de la talla de Diego Costa y Radamel Falcao García para reforzar la delantera, aunque finalmente solo llegó para ocupar el puesto de 9 el argentino Hernán Rivero, libre de Wanderers.
Peñarol enfrentará en enero un nuevo período de pases donde tiene que borrar todos los errores cometidos por la dirección deportiva que encabeza Pablo Bengoechea en este año.
Pero esta vez, para reforzarse, no contará con el respaldo de los ingresos frescos que traen las copas Libertadores.
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