El Profe en Peñarol, pasional

Fútbol > 20ª EDICIÓN FÚTBOLX100

El Profe Martínez: de Ribas a JR, de la selección a La Luz y de Peñarol a la emoción

El Profe Alejandro Martínez lleva una trayectoria de 27 años en las que pasó por múltiples y variadas experiencias: Julio Ribas, Juan Ramón Carrasco, un tiroteo en Honduras, una rapiña en el Parque Rivero, el orgullo de la selección y un título con Peñarol
Tiempo de lectura: -'
27 de diciembre de 2021 a las 05:03

Las charlas de Julio Ribas eran motivación pura. Con el fútbol como excusa para hablar de la vida, el Gladiador era capaz de disertar ante sus jugadores de Sud América durante largos períodos. Era tanta la tensión que flotaba en el ambiente que todos lo escuchaban de pie. Pero un buen día, la charla se extendió tanto que en determinado momento, el carrilero izquierdo Richard Rodríguez se sentó. Y por acto reflejo, todos se fueron al piso. Cuando el Profe Alejandro Martínez miró el reloj, se dio cuenta que la disertación de Ribas llevaba ya tres horas. 

Con Ribas, en el Sud América campeón invicto de la B en 1994, Martínez inició su camino en el profesionalismo uruguayo. El jueves pasado fue elegido en la encuesta Fútbolx100 como el mejor preparador físico de la temporada en la que terminó como campeón uruguayo con Peñarol. 

"Aquellas charlas eran pedagógicas, Julio es un libro de vida", evoca Martínez en diálogo con Referí

Con Ribas, Martínez también ganó la Copa Integración 1995 y llegó a cuartos de final de la Copa Conmebol de ese año tras vapulear en el estadio Artigas de Paysandú a Gimnasia y Esgrima La Plata de Carlos Timoteo Griguol por 4 a 0.  

Julio Ribas lo llevó al profesionalismo

Tras jugar en Miramar Misiones y Danubio, estudiar en el ISEF e iniciarse en la Liga Universitaria en Arquitectura Juniors y Universidad Católica, y posteriormente en las inferiores de Miramar Misiones, Martínez empezó en el fútbol grande junto al Gladiador, pero el tiempo lo llevó a trabajar con un hombre que practicaba ideas futboleras completamente distintas: Juan Ramón Carrasco. 

"Julio y Juan se tocan en la pasión que tienen por el fútbol pero con metodologías de trabajo diferentes; Juan lo hace con prevalencia en los sistemas de trabajo de ataque mientras que los de Julio comenzaban en defensa. Pero ambos con una pasión impresionante. Les estoy muy agradecido a ambos".

"Juan es diferente, más descontracturado, daba más libertad a la forma de entrenar. En Rocha se quedaba a patear con Alberto Martínez, estaban horas pateando, dirigía los entrenamientos descalzo, jugaba, porque es un enamorado del entrenamiento y lo que más me sorprendió siempre fue su gran creatividad para generar todos sus trabajos de ofensiva. El método de entrenamiento de Juan fue creado por él, cambió la forma de entrenar en el fútbol uruguayo y hasta para Mauricio (Larriera) ha sido una inspiración", confiesa el profe aurinegro. 

Con Carrasco trabajó en Fénix y de ahí llegaron a la selección uruguaya donde estuvieron entre junio de 2003 y marzo de 2004.

Juan Ramón Carrasco, otra forma de ver el juego

"La selección fue el orgullo más grande de mi carrera, pero lo más lindo fue esto de Peñarol, lo más emocionante. La selección fue orgullo por haberla alcanzado, por cantar el himno, por ver la bandera, porque la responsabilidad era enorme. El 3-0 contra Venezuela fue el día más triste de mi carrera, el que me marcó para toda la vida", recuerda.

"Uruguay hizo un buen partido pero lo que marca en el fútbol es el resultado que fue lo que quedó. Creo que fue injusta nuestra salida por ese partido que fue aciago para todos; sufrimos mucho, Juan sufrió mucho y fue triste para todos", agrega. 

El tiempo los volvió a reunir en Athletico Paranaense donde estuvieron al frente del equipo en 2012. 

Pero pocos recuerdan que después de la selección, Martínez se fue a dirigir a La Luz, con Julio Fuentes como entrenador. 

El equipo todavía tenía el Parque Luis Rivero a orillas del arroyo Miguelete en el corazón del barrio Aires Puros y de espaldas al 40 semanas. 

"La Luz fue darle sentido a lo que entiendo que es un docente de educación física que es un educador y un facilitador. Y un educador no hace distinción de personas. Fue muy importante para encontrarme conmigo y mi vocación en un equipo lleno de carencias donde vivimos situaciones de inseguridad y en donde volví a descubrir que la pasión seguía intacta. Fue muy movilizador".

¿Qué pasó en el Rivero? El equipo entrenaba en una mitad de la cancha porque la que daba contra el arroyo se inundaba. Entonces, las pelotas se iban acumulando en el sector. Un día, en pleno entrenamiento, entró un particular blandiendo un arma para robarse las pelotas. "A la distancia no se veía si el arma era verdadera o no, pero tres jugadores lo salieron a perseguir cuando se escapó por un hueco del muro de la cancha, uno de ellos era el Puchi Martínez. Yo salí atrás a pararlos para que no ocurriera una tragedia". 

Martínez también recuerda que el plantel sufrió un hurto en el vestuario que quedaba al lado del cantegril. "Recuerdo que en aquellos tiempos llevaba una cámara para grabar los entrenamientos y la ponía en un trípode y siempre me decían que tuviera cuidado". 

En San Pedro Sula, donde estuvo a cargo de la preparación física de Maratón de Honduras con Manuel Keosseian como técnico, Martínez la pasó peor. "En un entrenamiento sufrimos una balacera. Los jugadores me decían, 'cuerpo a tierra profe, cuerpo a tierra'. No llegué a ver si pasaron balas, pero que las escuché, las escuché". 

"Eran tiempos del auge de las maras, en especial de los Zetas. Otro día se nos quedó el ómnibus cuando estábamos yendo a cenar. Justo se quedó en la parte más peligrosa de San Pedro Sula. Los jugadores bajaron y salieron corriendo inmediatamente a la concentración. Uno ahí no sabe qué hacer, solo atina a imitar el comportamiento de los locales". 

Posteriormente, el camino de Martínez se unió con el del Larriera, en el Racing que hizo la mejor campaña de su historia en un torneo corto alcanzando los 32 puntos y el vicecampeonato detrás del maquinal Nacional de Álvaro Gutiérrez en el Apertura 2014.

Siguieron juntos en Defensor Sporting (2015), Al Wakra de Catar (2015-2016) y Godoy Cruz (2017). 

El reencuentro se dio en Peñarol. "Le estoy profundamente agradecido a Pablo Bengochea, Gabriel Cedrés y a la posibilidad de Mauricio Larriera", expresa con humildad. 

Mauricio Larriera, juntos desde 2014

"Es muy importante haber sido distinguido con este premio, no digo que sea la culminación de una etapa pero sí es ubicarme, gracias a los jugadores, en un selecto grupos de colegas que han alcanzado este reconocimiento, y lo valoro como un hecho muy importante y le agradezco a los compañeros de trabajo, a Pablo Placeres, a Ignacio Piñatares y Matías Vecino y fundamentalmente a los jugadores, que en definitiva llevaron adelante la tarea".

"El título de Peñarol fue la consolidación de una síntesis de jugadores muy profesionales que con su trabajo diario y su cuidado personal llevaron adelante lo propuesto por Larriera y ante todas las sugerencias de trabajo se acoplaron de forma espectacular a las propuestas metodológicas en un grupo espectacular formado por jugadores experientes y jóvenes que tomaron de estos sus enseñanzas", dice el profe. 

Consultado sobre qué tiene que tener un preparador físico para llegarle al plantel y sacarle el máximo rendimiento deportivo, como pasó con este Peñarol, Martínez responde: "Lo más importante es el respeto al jugador, el conocimiento de la función, y el trabajo en equipo. Por ahí el jugador va viendo y comprendiendo que para facilitarle y ayudarlo en su trabajo y que uno solo no puede porque necesita un equipo de profesionales y cuando lo comprenden y lo ven, depositan toda su confianza y su trabajo".

"Con Walter no se hizo ninguna excepción, el nivel que demostró es mérito por su profesionalismo"

"El desafío ahora es tratar de repetir la misma gestión de 2021 para intentar el bicampeonato y hacer una gran Libertadores. En materia de estilo de juego la vara quedó alta pero intentaremos repetir o mejorar la gestión de 2021. Va a ser muy difícil, pero vamos a ver qué plantel queda. La motivación y el desafío es el mismo: ser campeón a nivel local y a nivel internacional intentar la mejor figuración aunque tenemos el derecho a soñar con hacer una gran Libertadores después de la Sudamericana que hicimos donde con un poco de suerte pudimos llegar aún más lejos", concluye. 

Es el Profe Martínez. Profesional, pasional y experiente. Una de las claves que tuvo Peñarol para terminar como campeón uruguayo del 2021. 

 

 

 

 

Comentarios

Registrate gratis y seguí navegando.

¿Ya estás registrado? iniciá sesión aquí.

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 345 / mes

Elegí tu plan

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Te quedan 3 notas gratuitas.

Accedé ilimitado desde US$ 345 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 345 / mes

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Elegí tu plan y accedé sin límites.

Ver planes

Contenido exclusivo de

Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.

Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá

Cargando...