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Elecciones en asociación de fiscales se definen entre el diálogo o la confrontación con fiscal de Corte
La Asociación de Magistrados Fiscales del Uruguay (AMFU) define su futuro político este martes 22 con sus elecciones gremiales, a las que se presentan dos listas que coinciden con el diagnóstico de los problemas actuales del Ministerio Público, pero que discrepan en la forma de reclamar por las soluciones al fiscal de Corte, Jorge Díaz.
La lista 3 se presenta más inclinada al diálogo y a la búsqueda consensuada de encontrar cambios organizacionales que alivien la tarea de los funcionarios, mientras la lista 7 se define como más "confrontativa" con Díaz, en el entendido de que ya no son tiempos de comunicación sino de acciones. El argumento es que ya pasaron tres años desde que entró en vigencia el nuevo Código del Proceso Penal (CPP) y que persisten todavía los problemas de implementación y funcionamiento.
"La mayor diferencia entre ambos, el punto de inflexión, es que nosotros asumimos una postura más combativa, porque entendemos que se acabó la etapa del diálogo, y que hay que tomar medidas", dijo a El Observador Raúl Iglesias, el candidato a presidente de la lista 7, y que hoy es fiscal de Delitos Sexuales recién designado.
William Rosa –fiscal adscripto de Flagrancia de Montevideo– es el candidato del otro sector, y actualmente es el secretario general de la Asociación. Esta lista es la que ganó las últimas elecciones –de 2018–, y es liderada actualmente por la presidenta Mirta Morales, fiscal de Homicidios.
Rosa entiende que "la polarización" en dos bloques se gestó cuando el exfiscal Gustavo Zubía –hoy diputado del Partido Colorado– ejerció la conducción del gremio en 2016, tras la renuncia de Juan Gómez, fiscal de Homicidios que en las próximas semanas asumirá como fiscal adjunto de Corte.
Zubía estuvo al frente un breve lapso porque enseguida hubo elecciones y ganó la presidencia Dora Domenech, pero en ese tiempo el hoy diputado marcó claras diferencias con Díaz, lo que es criticado por la lista de Rosa en su programa.
"Tuvimos marcadas discrepancias con lo actuado por la Directiva presidida por la exfiscal Dora Domenech. Nuestra posición era que se procurara la mejora de nuestras condiciones laborales, modificadas en nuestro perjuicio y por falta de planificación adecuada desde la jerarquía (...) y no estar procurando un enfrentamiento mediático (especialmente por parte del doctor Zubía) con el fiscal de Corte, que dejaba incambiada nuestra situación", asegura el texto de la lista oficialista.
Pero para Rosa, no obstante, la unión entre los sectores en el diagnóstico común es más fuerte, ya que los fiscales comparten la misma "visión". "Si nos ponemos a escarbar, tenemos una consonancia en cuanto a que estamos en el mismo lodo. Hay cosas que están muy mal. No podemos trabajar así y las tenemos que cambiar", dijo Rosa.
Principales propuestas
Desde que en noviembre de 2017 entró en vigencia el CPP y se instaló un sistema oral y acusatorio, los fiscales tuvieron que hacerse cargo de las investigaciones penales, y por falta de recursos humanos sus jornadas laborales se extendieron de una forma que consideran dramática, algo que fue reclamado por los funcionarios desde el primer día.
El conflicto con el fiscal de Corte tuvo puntos de menor y mayor tensión. El más álgido ocurrió en mayo de 2019, cuando los fiscales tomaron una histórica resolución: un paro durante 24 horas. La medida fue promovida luego de la muerte de la fiscal adjunta Susana Rivadavia –una mujer de dilatada trayectoria dentro de la Asociación–, y que entonces era una de las voces más críticas contra las extensas jornadas laborales y quien más denunciaba la sobrecarga laboral que aún hoy sufren los fiscales de Delitos Sexuales.
Mirta Morales resumió en aquellos días que el gremio quería terminar con las "jornadas laborales extensas y cargas de trabajo extenuantes, a lo que suma una total incertidumbre sobre los derechos laborales que nos amparan".
El conflicto siguió su curso en el Ministerio de Trabajo y, si bien las aguas se calmaron –el fiscal de Corte creó desde entonces varias fiscalías nuevas en todo el país y tiene en proyecto crear otras–, para Iglesias sigue faltando "voluntad y sentido común". "Por ejemplo, no se nos escucha en temas como el diseño de los turnos o las licencias, que son cosas para las que no se necesita dinero, que es una de las excusas más frecuentes", sostuvo. En ese sentido, ambos sectores tienen en sus proyectos el objetivo de terminar con los 13 turnos únicos que hay en varios departamentos, y que implica que un fiscal debe encargarse de perseguir todos los delitos que se cometan en su jurisdicción sin descanso ni rotación.
Asimismo, las listas también tiene algunos puntos de su propia agenda. La lista 3, por ejemplo, plantea el seguimiento atento en el Parlamento del proyecto de ley que propone el blindaje jurídico a los fiscales para que estos no puedan ser pasibles de demandas individuales por su trabajo –y que sea en cambio la institución la que reciba la reclamación directa–, mientras que la lista 7 hace hincapié en aspectos puntuales del funcionamiento diario del Ministerio Público, como la demora en la sustitución de los fiscales cuando son trasladados; la equiparación salarial entre los fiscales departamentales y los de Montevideo; más personal administrativo para dar apoyo a los fiscales o que la institución se haga cargo íntegramente de las mudanzas.
La votación
Detrás de la candidatura de Raúl Iglesias de la lista 7 irá la expresidenta Brenda Puppo –que asumió en 2018 ante la jubilación de Dora Domenech–, Luis Alvez, Claudia González, Sandra Fleitas, Daniela Revello, Ricardo Perciballe, Jimena Zubía –hija del exfiscal Gustavo Zubía–, Delia Peirán y Mariela Suárez, también entre otros.
Para las elección están habilitados para votar alrededor de 300 fiscales, lo que representa más del 90% del total del total de los funcionarios.
En atención a la situación sanitaria por la pandemia del coronavirus, el voto se hará de manera electrónica, en un horario extendido.
