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Acusaciones y entredichos en la virtualidad: Cosse respondió a distancia tras meses desde su convocatoria
"¿El resto nos está viendo?", preguntó el edil nacionalista Javier Barrios Bove desde un cuadrado en la pantalla. "Vemos y escuchamos perfectamente", le respondieron desde otro punto del monitor. "Yo te veo pero no te escucho", le espetó un tercero. "Ahora sí lo vemos", le indicaron. "Yo sigo sin verlo", confesó otro de los participantes del encuentro vía Microsoft Teams.
Más de cinco horas después del horario previsto, el llamado a sala vía virtual a la intendenta Carolina Cosse parecía reacio a comenzar. La instancia llegó más de tres meses después de su convocatoria a instancias de nacionalistas —y el apoyo del resto de la oposición—, a raíz de un hecho acontecido a comienzos de febrero. La antesala del encuentro incluyó dos postergaciones por razones sanitarias y un chisporroteo sobre la modalidad para concretarlo.
Es que de cara al aniversario del Frente Amplio, Cosse propuso donar víveres para las ollas populares y escribir cartas con mensajes de aliento. Tras la campaña, la comuna quedó encargada de distribuir lo recolectado, algo que desde la oposición manifestaron que atentaba contra la institucionalidad. A pedido del Partido Colorado, Cosse accedió a retirar las cartas de las donaciones.
La espera
En la previa los blancos habían manifestado su molestia a raíz de la decisión de la Intendencia de Montevideo (IMM) de que el llamado a sala fuera por videoconferencia.
La convocatoria tan dilatada en el tiempo arribó, pero a pesar de estar programado para las 11 horas, eran las 15 horas y aún estaba lejos de empezar. Las exposiciones ocurrieron después de las 16.30 horas y continuó hasta la noche.
La bancada del Partido Nacional compareció unida desde la Sala de Sesiones del Palacio Gómez. "Es donde la gente nos puso", argumentó el coordinador Diego Rodríguez. Desde el Frente Amplio sin embargo entendían que la resolución votada a raíz de la emergencia sanitaria era clara en señalar que la participación "es presencial o virtual", no "mixta", al decir de la presidenta de la Junta Departamental, Sandra Nedov (MPP).
El coordinador de la bancada colorada, Tulio Tartaglia, pasó el mensaje a los otros tres ediles de su partido de que los blancos llamaban a que todos los dirigentes estuvieran presentes en la Junta, a pesar de que la jefa comunal fuera a asistir desde el Palacio Municipal. "Todos tenemos nuestras ocupaciones y no podíamos estar solo porque a los blancos se les ocurría ir presencial", opinó el edil Gustavo Facciola (Ciudadanos).
Los nacionalistas mantuvieron su posición tras deliberar en un cuarto intermedio de unos 40 minutos. "Nunca dejamos de ser virtual: estamos en sala y conectados cada uno con laptops", retrucó Barrios Bove. Entonces la frenteamplista Nedov suspendió de forma momentánea la sesión para llamar al orden. Las negociaciones se extendieron por horas, en un receso que calzó a la perfección para un almuerzo.
Sobre las 16 horas, la sesión se retomó y el Frente Amplio cedió a que los nacionalistas permanecieran en el hemiciclo del Palacio Gómez, tras una discrepancia que consumió cinco horas.
Barrios Bove comenzó su disertación entre ecos y videos trancados. "Hay un delay en la plataforma, con lo cual es bastante difícil hilvanar una idea", manifestó el edil convocante. A uno de los rectángulos en pantalla se le escapó la palabra "bochorno" antes de notar que no estaba muteado.
El edil, de Por la Patria, hizo un repaso minucioso de la sucesión de hechos que llevaron a la convocatoria. Los blancos sostienen que la intendenta está haciendo de la intendencia su "plataforma política".
Barrios declaró que "no se puede estar en la misa y en la procesión al mismo tiempo", siendo que la iniciativa de entregar alimentos surgió a propuesta de Cosse. Los nacionalistas apuntaron también contra el mural del expresidente Tabaré Vázquez en el Cementerio de La Teja en el que la intendenta se sacó una foto.
Desde la Sala de Acuerdos del Palacio Municipal, la intendenta defendió como "razonable" la distribución dada la capacidad logística de la comuna, y sostuvo que se aceptarían aportes "vengan de quien vengan". Y, en un discurso de 75 minutos, Cosse enumeró más de 100 medidas adoptadas con el Plan ABC.
Respecto a la pintada en el cementerio, recordó con voz quebrada el vínculo de Vázquez con su barrio La Teja, y fundamentó que el mural se trató de un "homenaje" y no así de una "publicidad" o "propaganda", ambas prohibidas por el digesto municipal.
Las restantes intervenciones —a raíz de una alocución del socialista Nicolás Lasa sobre la "desigualdad" como "meollo" del asunto— discurrieron entre las alusiones al gobierno nacional y las constantes interrupciones entre las bancadas cada vez que se iban del tema central del llamado a sala.
Los frenteamplistas intentaron cortar varias veces a la herrerista Adriana Balcarcel cuando enumeró las medidas del Poder Ejecutivo nacional por la pandemia y Claudio Visillac (Asamblea Uruguay) lanzó que se había "bastardado la herramienta" de la convocatoria.
A su turno, el nacionalista Rafael Rondán arremetió contra Cosse por no contestar las preguntas. Así, antes de ingresar en un cuarto intermedio, el edil acusó al oficialismo de "doble discurso" luego de que le hubieran criticado por faltar el respeto y Miguel González (FA) le replicó: "Doble discurso tenés vos, hermano".
Diego Rodríguez intentó hablar de TV Ciudad. Lo cortaron al considerar que estaba fuera de tema. Siguió. La presidenta del Cuerpo le pidió que no la obligara a llamarlo al orden, y el nacionalista pidió un cuarto intermedio para argumentarles por qué el canal municipal debía surgir en el debate: "Porque la verdad se están pasando de atrevidos", le lanzó a los frenteamplistas.
Entrada la noche en Montevideo, el llamado a sala seguía su curso.
