El presidente argentino, Alberto Fernández, se refirió a la muerte de Diego Armando Maradona, a quien calificó como "personaje único e irrepetible" y valoró los mensajes de otros mandatarios que, a los pocos minutos de conocerse la noticia, le mandaron sus condolencias. Desde los expresidentes José Mujica y Luiz Inácio Lula da Silva, hasta el mandatario español, Pedro Sánchez, —el primero en escribirle—, el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, y la carta pública del francés Emmanuel Macron, Fernández rememoró la importancia que Maradona tuvo para la sociedad argentina haciendo hincapié en sus logros futbolísticos y dejando a un lado los cuestionamientos personales.
"Es un personaje único e irrepetible. Ha entrado en el alma de todos los argentinos", dijo en conversación con Closs Continental, donde recordó las historias del exarquero Sergio Goycochea, quien le comentó que muchos ciudadanos de la periferia se le acercaban para confesarle que Maradona y la selección argentina eran los únicos capaces de levantarles la felicidad.
Para el presidente de Argentina, los cuestionamientos al exjugador de Boca parten de una exigencia que involucra cada acción que realizaba. "La sociedad argentina fue muy dura con Maradona. Lo pusieron en la obligación de ser un modelo de conducta nuestra y le juzgaron cada acto de su vida de un modo implacable y él era, como me dijo muchas veces que lo vi, en esencia, tan solo un hombre, un ser humano", dijo.
En su opinión, los argentinos no son "conscientes" del impacto que causó el exfutbolista que, a su entender, fue "el mejor jugador del mundo que el fútbol ha visto", además de "un gran embajador" que dio a su país "felicidad".
Sobre los incidentes ocurridos en su velatorio, Fernández explicó que, pese a los conflictos, la situación estaba bajo control en un principio y defendió la idea de organización que propuso su gobierno. "Si no hubiéramos organizado esto, todo hubiera sido peor. Porque era imparable", indicó. "Todo funcionó muy bien hasta que algunos viendo que el horario los iba a dejar afuera se precipitaron sobre la puerta de entrada y la rompieron", agregó sobre el momento en que los fanáticos ingresaron al establecimiento presidencial.
"Siempre pensábamos que Diego revivía y las últimas veces no lo habíamos visto bien, pero pensábamos que iba a salir adelante y esta vez no pudo, lamentablemente", concluyó Fernández.
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