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Giraluna, el coro de niños y adolescentes que no tiene techo
Giraluna es un centro de educación alternativa sin fines de lucro, que desde la década de 1980 – puesto en práctica por el párroco Victor Hugo- recibe a niños y adolescentes carenciados de Nuevo París y sus alrededores. Desde su génesis, el fin es ayudar y apoyar a las familias más necesitadas. A mediados de los 90 comenzó a inclinarse por lo artístico.
En la actualidad cuentan con dos centros, el Centro Juvenil –que está compuesto por 55 adolescentes- y el Club de Niños, que lo integran 75 pequeños. Están separados en dos instituciones, pero algunas actividades las realizan juntos, como es el caso del coro.
Los talleres se dividen por edades en ambos centros. En el caso de los niños, se fracciona en tres grupos. Los niños y adolescentes concurren todos los días durante cuatro horas y tienen actividades como recreación, mandalas, música, huerta, apoyo psicológico, teatro, danza, percusión, coro y apoyo en la educación formal. "Hay un seguimiento cuerpo a cuerpo en los estudios", dijo la directora de Giraluna Ana Campoleoni.
En 1996 lograron hacer un convenio con el INAU, que se dio por trabajar con población de alta vulnerabilidad social y económica. "Familias que dentro de sus recursos propios no cuentan con recursos económicos, ni sociales -y muchas veces- ni familiares. Hay mucha soledad como para garantizar el desarrollo de estos niños", agregó la directora. Una vez realizado el acuerdo con el INAU, se comenzó a apuntar a lo profesional y a lo técnico. Desde ahí, Giraluna contaba con asistentes sociales, maestros, psicólogos y talleristas.
"No se cruza solamente la pobreza, se cruza que hay intervenciones judiciales, que hay abuso, que hay violencia. Y esos son los niños y adolescentes que vienen a Giraluna".
Esta ONG se dio a conocer en más de una ocasión por su desempeño artístico, sobre todo con las presentaciones del coro. Los infantojuveniles grabaron dos discos: Que salga la luna (2009) y Tardes infinitas (2010).
Todos los miércoles a las 16:30, 54 infantes y adolescentes se reúnen en el Club de Niños de Nuevo Paris para calentar sus cuerdas vocales y ensayar sus canciones. Esta actividad comienza en 2005 con la llegada de Adrián Posadas como docente de música. El equipo técnico de Giraluna quería encontrar una forma de darse a conocer en el afuera, buscaban generar encuentros. Ese mismo año los invitaron a participar en un libro y el grupo comenzó a soñar con lanzar su primer disco.
Cuatro años después –en 2009- lanzan Que salga la luna, con el que ganan su primer premio Graffiti en 2010. "Eso fue una bendición del mundo del arte, fue como recibir apoyo de quien no estaba en lo nuestro". Lo presentaron en la sala Zitarrosa colmado de público, y a partir de allí se abrieron muchas puertas para el coro.
Según Campoleoni, las premiaciones "fueron logros, proyectos que se fueron concretando y con éxito. Esto no quiere decir que no se tengan fracasos, porque te caes y te levantas. Conoces el sabor del éxito, sos ganador".
El coro no es más que un pretexto para promover la niñez. Para la directora, en Uruguay se promueve muy poco la infancia y es fundamental hacer hincapié en eso. Pretenden denunciar que "según donde nazcas es las oportunidades que tenés". Es decir, muchos de los pequeños que asisten a esta ONG viven balaceras, abandono de los adultos del hogar por días, falta de comida, entre otras problemáticas similares.
En el medio de los dos discos, hicieron una gira por nueve departamentos acompañados de 120 niños y adolescentes. Esto pudo lograrse gracias a que ANDA cubrió el gasto del traslado.
El coro fue invitado a participar en más de un espectáculo. Entre las propuestas, el año pasado actuaron con títeres Girasol en vacaciones de invierno, donde asistieron 45 niños. Asimismo, cantaron dos canciones con Natalia Oreiro -en la presentación de su disco de Gilda- frente a 35.000 personas en el Teatro de Verano.
Por otro lado, el grupo infantojuvenil de Giraluna hizo una galería de arte a cielo abierto en 18 de julio, guiada por 15 artistas reconocidos. Con este proyecto se vistió la avenida principal con 56 estandartes de 1,50 x 80 centímetros. A su vez, en el día del niño lanzaron la consigna "Niñez patrimonial de la humanidad", con la que quieren llegar a la UNESCO.
Actualmente están buscando apoyo de empresas u organismos para poder llevar a cabo una nueva gira por el país con un espectáculo protagonizado por todos los alumnos.
El centro tiene carencias edilicias y el objetivo de Campoleoni es "convertirlo en un hermoso centro cultural, con piscina y polideportivo. Nuevo Paris no tiene y lo tiene que hacer Giraluna".
Los pilares de Giraluna son amor, creatividad y disciplina.
"No sos parte del mundo hoy si no tenés una metodología de trabajo, una constancia, una disciplina y un objetivo y esto es lo que genera el coro hoy".
