El sueco Zlatan Ibrahimovic volvió a tener un choque con Edinson Cavani, ahora con un acto de soberbia cuando le gritó a él y al resto de sus compañeros: “el jefe soy yo”.
El hecho, donde Zlatan volvió a dar una muestra de su arrogancia, ocurrió el martes por la noche, después de que Paris Saint-Germain clasificara para la final de la Copa de la Liga francesa tras derrotar 1-0 a Lille.
El sueco encabezó la salida de los vestuarios de un nutrido grupo de jugadores del equipo parisino y cuando cruzaba la zona mixta, donde los periodistas esperaban para realizar las notas, giró hacia sus compañeros y les instó a no hablar a los medios: “Seguid, seguid, que nadie hable”, les dijo. Y para que quedara claro remató: “El jefe soy yo”. El hecho quedó grabado en las camáras de varios medios.
En ese grupo de jugadores estaba el salteño Edi Cavani junto a Lucas, Camara, Maxwell -que anotó el gol del triunfo- y Marquinhos. El hecho es que todos acataron menos Lucas.
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