Incidentes, pedradas y una docena de detenidos en desalojo del Codicen

Entre los detenidos se encuentra el presidente del sindicato de profesores de Montevideo (ADES), Emiliano Mandacen. Fuentes policiales informaron a El Observador que los estudiantes no ofrecieron resistencia y que cuando la Guardia Republicana ingresó los jóvenes se autoevacuaron por la puerta trasera del edificio.

Los desmanes ocurrieron cuando la mutlitud de gente que apoya a los estudiantes desde afuera, entre ellos integrantes de ADES, Plenaria Memoria y Justicia –liderada por Irma Leites, que estuvo presente cuando se produjeron los incidentes– y el Sindicato Único del Taxi– intentaron impedir a la Policía el ingreso y comenzaron a lanzar piedras.

Tras el desalojo, los incidentes se trasladaron hasta la avenida 18 de Julio donde continuaron los enfrentamientos con las fuerzas policiales.

Por su parte, fuentes judiciales vinculadas al caso informaron a El Observador que no fue la Justicia quien pidió el desalojo del edificio. Más allá de eso, no supieron precisar de dónde provino la orden.

Previamente, la Justicia había solicitado al Ministerio del Interior que en las primeras horas de la mañana de hoy elevara los antecedentes de los estudiantes ocupantes para analizar si están incurriendo en algún tipo de delito,informaron a El Observador fuentes judiciales.

Según se adelantó los estudiantes podrían llegar a ser acusados, incluso, del delito penal de violencia privada por no permitir a trabajadores ajenos a la ANEP ingresar a trabajar en el edificio. No obstante, se aclaró que eso lo deberá definir el fiscal del caso, dado que lo que resuelva el juez "no puede ser más severo de lo que disponga el ministerio público".

La medida de los estudiantes, que desde el viernes ocupaban el edificio donde se encuentra el Codicen (Av. Libertador y Colonia), no solo afectaba a los trabajadores de este organismo, sino también a empleados del Banco de Seguros (BSE), del Banco Hipotecario (BHU) y del Ministerio de Economía (MEF), que tienen sus oficinas en la misma edificación.

Las fuentes judiciales informaron que el lunes de mañana una delegación de trabajadores del BSE presentó en la seccional 3º una denuncia señalando que no podían ingresar a su lugar de trabajo debido a la medida de los estudiantes.

Los trabajadores entregaron las llaves de sus oficinas a la Policía y advirtieron que se deslindaban de cualquier responsabilidad sobre lo que podía llegar a suceder en ellas.

La denuncia obligó a la Justicia a enviar en la mañana de ayer al edificio del Codicen una representación policial con el objetivo de disuadir a los estudiantes de levantar la ocupación. Sin embargo, la misión fracasó. Los estudiantes ni siquiera accedieron a mostrar la cédula de identidad a los uniformados. En consecuencia, la Justicia ordenó la elevación de los antecedentes de los estudiantes.

Las fuentes explicaron que al no tener ni siquiera el documento de identidad, se intentarán reunir los antecedentes a partir de las distintas denuncias que recibió la Seccional 3º por el hecho.

Además de la que realizaron los trabajadores del BSE, se encuentra la que el viernes realizaron las autoridades del Codicen.

Apoyo de grupo radicales

El conflicto en la educación abrió a los grupos radicales un flanco desde donde atacar al gobierno. La Coordinadora de Estudiantes de Enseñanza Media (CEEM) lleva a cabo la medida con el apoyo de los sindicatos de docentes más combativos, como el de profesores de Secundaria de Montevideo (ADES). A su vez, están respaldados por la organización Plenaria, Memoria y Justicia y del Sindicato Único del Taxi (SUATT). Ayer luego de la intimación del MTSS y antes del desalojo, una caravana de taxis se hizo presente en el lugar para manifestar apoyo.