Un informe primario realizado por Fiscalía descarta que el fiscal de Flagrancia Fernando Romano haya cometido violencia de género a su par Gabriela Fossati, confirmaron fuentes del organismo a El Observador.
El reporte detalló que se trató de una "discusión entre pares" y "no" un caso de "violencia de género", informó Búsqueda y ratificaron desde Fiscalía.
Fuentes de la institución aclararon que "la investigación no está terminada", y ambas partes continúan con sus actuaciones. Desde el organismo indicaron que aún falta la declaración de varios testigos de los hechos, sucedido a mediados de marzo.
La discusión entre los dos fiscales de Flagrancia comenzó por una entrevista que Romano realizó al excustodio presidencial Alejandro Astesiano en los días que subrogó a Fossati en la investigación, dijeron fuentes al tanto de lo sucedido a El Observador.
El intercambio fue subiendo de tono –hubo varias acusaciones de uno y otro lado sobre cómo se está afectando a la institución– y terminó girando en torno a simpatías de los implicados con partidos políticos.
Allegados a Fossati señalan que Romano actuó con suma violencia, agredió verbalmente a su colega y que todos los presentes quedaron muy afectados por la situación. La fiscal, que en los últimos días anunció su salida de Fiscalía para los próximos meses, reportó la situación y el organismo ordenó una investigación de urgencia el 15 de marzo.
Personas cercanas a Romano, en tanto, le quitan importancia al entredicho y aseguran que fue una discusión sobre un hecho concreto en el que ambos elevaron la voz y que los testigos del episodio –la fiscal adscripta que trabaja con Fossati, Gloria Nicolini, y el coordinador Juan Pablo Bardino– podrán confirmar que allí no sucedió nada más que eso.