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La clave de Nacional está en los jugadores
El partido de este domingo es clave para Nacional. Si no gana, no solo dilapidará una ocasión importante de definir el Campeonato Uruguayo y cortar el tri de Peñarol, sino que va a incrementar el clima de incertidumbre que se generó en las últimas tres fechas, nada menos que en la semana previa al clásico, que se jugará el domingo 17 en el Centenario.
Es clave además, porque el rival es Progreso, equipo con el que comparte la primera posición del Clausura. Y en el Paladino, una cancha a la que no van los jugadores de los equipos grande. Fue en otra cancha chica, el Saroldi, donde Nacional perdió el invicto en el actual torneo.
Hasta ese partido contra River Plate, el camino era de rosas para los tricolores. Llegó con una racha de nueve victorias consecutivas, una dinámica y una confianza que le hacía ganar los partidos aunque no jugara bien. El técnico y los jugadores destacaban entonces como una virtud importante, no recibir goles. Solo uno, y de penal, le habían convertido durante esos nueve encuentros (dos del Intermedio y siete del Clausura). Contra River recibió tres y sintió el golpe.
Al partido siguiente volvió a caer, esta vez contra Cerro Largo en el Gran Parque Central. Dos derrotas seguidas que lo dejaron tambaleante en las tablas de posiciones, perdió la diferencia que le había sacado a Peñarol, le dio espacio para la recuperación a los aurinegros que al mismo tiempo entraron en una racha positiva de resultados y se agudizaron los cuestionamientos.
El jueves se reacomodó con la victoria 2-0 ante Fénix, aunque el rendimiento general e individual volvió a dejar interrogantes. Anímicamente el triunfo le vino bárbaro, porque recuperó las posiciones de privilegio.
Pero, ¿qué pasó en las últimas tres fechas? ¿Por qué perdió dos de los últimos tres partidos? ¿Cambió tanto el equipo? ¿Ya no le acierta tanto Gutiérrez con la rotación? ¿Dejó de ser un fenómeno el preparador físico Marcelo Giarrusso? ¿En 15 días se desarmó todo lo construido en los últimos meses?
Mantuvo la columna
Hay siete jugadores que fueron titulares en los últimos tres partidos: Luis Mejía, Felipe Carvalho, Matías Viña, Gabriel Neves, Felipe Carballo, Gonzalo Castro y Gonzalo Bergessio.
Un octavo, Guzmán Corujo, salió de la alineación en las últimas dos jornadas porque se desgarró; lo sustituyó el juvenil Mathías Laborda. Es decir que Gutiérrez mantuvo la columna vertebral, no desarmó el equipo de un partido a otro.
El bajón fue individual. Viña, que fue elegido por la AUF como el mejor jugador del campeonato en el mes de setiembre, no rindió igual después que volvió de jugar con la selección los dos partidos contra Perú. Nacional perdió el socio de Gonzalo Castro para abrir defensas por la izquierda.
El Chory también mostró intermitencias en su juego. El jueves entró Pablo García por izquierda y enriqueció el ataque.
Gabriel Neves y Felipe Carballo, dos jugadores que mejoraron notoriamente la recuperación y el trato del balón en la mitad de la cancha, perdieron precisión en los últimos encuentros.
Los que mantuvieron el rendimiento son el golero Luis Mejía y el goleador Gonzalo Bergessio. Lo del argentino se destaca como líder futbolístico y anímico del equipo.
Contra Fénix, Gutiérrez sacó del medio a Rafa García, sostén de la defensa, para incluir a Matías Zunino. Visto el rendimiento de éste, inseguro y molesto con el árbitro (Rojas no sancionó un penal en su contra), no fue un buen cambio.
En el lateral derecho alternaron en estas tres fechas Guillermo Cotugno y Armando Méndez con suerte diversa, pero los que no logran mantener una producción satisfactoria son los juveniles
Santiago Rodríguez y Brian Ocampo.
Nacional necesita que levanten sus rendimientos los jugadores claves. Si lo consigue, volverá a creer en sí mismo. El examen de este domingo será fundamental.
LAS CIFRAS
17 goles en el Campeonato Uruguayo son los que suma el argentino Bergessio.
3 goles en la Copa Libertadores 2019 marcó el delantero. En total tiene 20 oficiales en la temporada.
GONZALO CASTRO, EL SOBREVIVIENTE DE 2006 EN EL PALADINO
La última vez que Nacional visitó la cancha de La Teja fue en 2006 y ganó 2-1, con tantos de Diego Perrone y Diego Alonso. Para Progreso marcó Néstor Silva.
El tricolor jugó en esa cancha, que esa vez estaba en malas condiciones, tres días después de ganarle a Boca Juniors por la Copa Sudamericana. Gonzalo Castro fue uno de los atacantes y es el único sobreviviente de aquel equipo en el actual plantel.
En esa última oportunidad, el estadio pasó las exigencias de la Intendencia y los dirigentes destinaron 2.800 entradas para los albos. Se construyeron tres baños nuevos para caballeros y dos para damas. Para la prensa se acondicionó un lugar en la platea.
Para el Apertura 2007, Progreso fijó el estadio Charrúa para enfrentar a Nacional. No pudo jugar en el estadio Centenario porque había un recital de los españoles Joan Manuel Serrat y Joaquín Sabina.
El tricolor ganó 1-0 con gol de Nicolás Lodeiro.
Por el Apertura 2018, Progreso fijó el Nasazzi y ganó 2-1, con tantos de Gastón Colman y Danilo Cóccaro de penal.
En la temporada actual, Progreso disputó 15 partidos en su cancha, de los que ganó ocho, empató cinco y perdió dos. Cayó frente a Plaza Colonia y Defensor, ambos en el Apertura. Desde entonces no pierde en su cancha.
