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La estricta decisión de la Premier League para que no suceda lo de Aguirregaray y Arezo y se juegue más tiempo
El lateral derecho Matías "Vasquito" Aguirregaray y el delantero de Peñarol, Matías Arezo, fueron los dos futbolistas aurinegros que, en distintas jugadas del partido ante Cerro del pasado sábado que terminó empatado 1-1 por la primera fecha del Torneo Clausura, se tiraron al foso de la Tribuna Ámsterdam del Estadio Centenario, el cual estaba lleno de agua.
Más allá de la gélida temperatura que había con vientos y rachas huracanadas debido al ciclón extratropical que afectó la franja costera de Uruguay en esa jornada, los dos no dudaron en hacer eso para que el juego se hiciera más fluido.
Es que los alcanzapelotas de Cerro desaparecieron o entregaban el balón con desdén, sin apuro, teniendo en cuenta que el empate ante Peñarol no les venía nada mal. Cabe resaltar que los mismos son jugadores de las inferiores del club de la Villa.
El fútbol uruguayo desde hace tiempo que tiene un protocolo votado por los clubes, pero no se cumple. Se juega con una pelota en cancha y solo dos fuera de la misma, y eso lleva muchas veces, además de las protestas a los árbitros y otras jugadas, a que Uruguay sea uno de los países en los que menos tiempo de juego se disputan fin de semana tras fin de semana. En ese sentido, el profesionalismo está lejos.
La drástica decisión que tomaron en Inglaterra
Justamente debido a las pérdidas de tiempo, el año pasado en Inglaterra, para el inicio de la Premier League, se tomaron algunas decisiones importantes para que el juego se hiciera más fluido y no se tardara tanto en volver a competir en todos los encuentros.
En el fútbol inglés, desde hace exactamente un año, agosto de 2022, se utiliza un sistema de multibalones.
Es por eso que se utilizan un total de 10 pelotas por partido, las cuales están distribuidas de manera estratégica por la cancha.
Una de las pelotas está en juego desde el comienzo del partido, otra está en poder del cuarto árbitro y ocho repartidas por fuera del campo (dos detrás de los arcos y dos cerca de las líneas laterales).
Estos balones están colocados en conos y los encargados de reponerlas siguieron siendo los alcanzapelotas, quienes fueron más controlados.
Los juveniles de los clubes tienen la instrucción de devolver los balones a la misma velocidad para ambos equipos y tienen que asegurar que todo el tiempo los ocho balones estén colocados alrededor de la cancha.
En el primer año en que se utilizó este sistema, el fútbol inglés ha ganado en dinámica y en más tiempo de juego, según reportaron distintos informes registrados en la prensa de ese país.
