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La operación para detener a hijo de "El Chapo" Guzmán dejó 29 muertos en México
La operación para detener en Culiacán a Ovidio Guzmán, hijo del encarcelado narcotraficante Joaquín "El Chapo" Guzmán y líder del cartel de Sinaloa, dejó 10 militares y 19 presuntos delincuentes muertos, informó gobierno mexicano.
Tras la batalla entre soldados y narcos que intentaron detener el traslado de su jefe a México DF, la ciudad de Culiacán comenzó a normalizar paulatinamente sus actividades, interrumpidas por los tiroteos, que incluso alcanzaron a un avión de pasajeros.
El propio presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) dijo que "hay una calma en estas últimas horas" en la ciudad y negó que la detención fuera un obsequio a su colega estadounidense Joe Biden, que el lunes llegará al país.
Para la captura del capo Narco, el gobierno desplegó unos 4.500 efectivos para controlar la ciudad ubicada en el noroeste del país que se convirtió el jueves en un escenario de guerra al igual que hace dos años, en el primer “Culiacanazo”.
Las autoridades nacionales dijeron que no se reportaron civiles entre los muertos y si diez soldados, entre ellos un coronel de infantería que comandaba un batallón en el operativo.
La secretaría de Defensa informó que “además se "contabilizaron 19 fallecidos por parte de los transgresores de la ley", reportó la agencia de noticias AFP.
Tras la detención del apodado “Ratón” Guzmán, de 32 años y reclamado por Estados Unidos, el cártel de Sinaloa lanzó una ofensiva para rescatar a su jefe.
Las fuerzas de seguridad retiraron el viernes decenas de autos robados e incendiados a lo largo de la ciudad de 800.000 habitantes, en cuyas calles se libraron el jueves feroces batallas que alcanzaron el aeropuerto internacional y provocaron escenas de pánico entre la población.
Otros 35 militares sufrieron heridas de bala y recibieron atención hospitalaria, mientras que 21 delincuentes fueron arrestados, según el parte oficial.
La captura se produjo después de seis meses de trabajo de inteligencia y dos días antes de la visita del presidente norteamericano Joe Biden a México junto a su colega canadiense Justin Trudeau.
"No compartimos la interpretación de que la recaptura de Ovidio Guzmán es una entrega a (el presidente estadounidense) Joe Biden, nosotros actuamos con autonomía", advirtió además el mandatario, según consignó el periódico El Universal.
Según AMLO, "no hubo intervención de Estados Unidos en la recaptura” del capo narco, pero sí cooperación entre ambos países.
En paralelo con ese anuncio, una jueza decretó la suspensión de una eventual “deportación, expulsión, extradición y su ejecución" de manera que "no sea entregado al gobierno de los Estados Unidos de América, ni a ningún Estado diverso".
Washington reclama a Ovidio Guzmán y a su hermano Joaquín por conspiración para exportar a ese país cocaína, metanfetaminas y marihuana, y ofrecía una recompensa de cinco millones de dólares por cada uno.
El canciller mexicano, Marcelo Ebrard, ya había descartado ayer mismo una extradición exprés de Guzmán a Estados Unidos.
En medio de la ofensiva de los integrantes del cártel de Sinaloa para rescatar a su jefe también fueron impactados un avión de pasajeros momentos antes de despegar y dos aeronaves de la Fuerza Aérea mexicana, que tuvieron que hacer aterrizajes de emergencia.
