El presidente de honor de Liga de Quito, Rodrigo Paz, le tiró con munición pesada a
Gustavo Munúa, quien se fue del club tras una floja campaña. Al mismo tiempo, destacó el trabajo que está realizando Pablo Repetto.
"Nos equivocamos en anclarnos en la propuesta de Munúa, en la cancha no se veía el trabajo que realizaba en los entrenamientos. Los jugadores parece que estaban confundidos" expresó Paz en la prensa ecuatoriana.
Agregó que "me sorprendió al final de forma increíble (la actitud de Gustavo Munúa con relación a su rescisión), desagradable diría yo. Unas aspiraciones ilógicas, falta de consciencia que de 20 partidos ganó solo uno (en Serie A). No podría hablarse de éxito. Él verá qué hace con sus derechos y nosotros defenderemos lo nuestro".
Indicó que las pretensiones de Munúa para rescindir el contrato "me parecen una tontería de él, quería terminar hasta donde estuvo (cobrar hasta junio) y se le daba una compensación de dos meses. A ratos dice que quiere que le paguen 4 meses, a veces hasta fin de año. Mal asesorado. No es consecuente, ningún equipo en el mundo ha aguantado a un entrenador con una victoria en 20 partidos".
También señaló que "es malo ser pendejo y eso fue lo que hicimos. Entrenaba bien pero no pasaba eso en la cancha. Trajo malos jugadores, que fueron los dos extranjeros recomendados por él (Felipe Rodríguez y Rubén Olivera). Creíamos que había que darle chance y ahí nos perdimos en el camino".
En la misma entrevista destacó la labor que desarrolla Pablo Repetto, reemplazante de Munúa: "Estoy muy contento con él; el estilo de juego ha cambiado".