Los blancos y el FA siguen enroscados en armado de listas y su campaña se retrasa

Las negociaciones por los lugares en las listas y por saber cómo se buscará llegar a tal o cual banca en Diputados y Senadores, así como las respectivas suplencias, retrasan la operativa que eche a andar la maquinaria en la campaña de los sectores del Partido Nacional y del Frente Amplio. 

Es que el hecho de que los dirigentes estén desde el inicio de julio ocupados en reuniones le saca tiempo para empezar a realizar recorridas y planificar la operativa de la campaña, según dijeron a El Observador dirigentes blancos y frenteamplistas.

Eso, además, mantiene expectantes a los candidatos, que ya empiezan con sus recorridas pero que saben de la necesidad de los aparatos partidarios para que la campaña termine de encender sus motores.

Allegados al candidato del Frente Amplio Daniel Martínez siguen con atención las negociaciones entre los grupos oficialistas porque advierten que las idas y vueltas demora la salida al territorio del aparato sectorial.

En el Frente Amplio tenían previsto cerrar los acuerdos de sublemas y alianzas departamentales entre fines de julio y los primeros días de agosto pero casi a mediados de este mes la mayoría de los acuerdos todavía están por resolverse. Los blancos manejaban plazos similares.

Las negociaciones también inquietan al candidato blanco Luis Lacalle Pou, quien busca zanjar esta etapa sin resquemores para asegurarse la unidad de los blancos pero a la vez asume que habrá dirigentes relegados y dolidos por las decisiones. 

La clave de la acumulación

Leoanardo Carreño.

Mientras, Lacalle Pou y su compañera de fórmula, Beatriz Argimón, se lanzaran esta semana a recorrer el interior, en el Partido Nacional faltan cerrar acuerdos del orden para las listas al Senado, las respectivas suplencias, y eso retrasa la negociación de puestos y las suplencias de Diputados en algunos departamentos, sobre todo los que tienen más bancas como Montevideo, Canelones y Maldonado. Aunque los acuerdos están encaminados para los primeros lugares al Senado de los diferentes sectores, todavía faltan resolver suplencias, dijeron los informantes. 

Dentro del sector Todos que lidera Luis Lacalle Pou definen detalles de ingeniería electoral y uno de ellos es terminar de resolver qué grupos apoyarán en el interior el Senado que presente el Espacio 40 liderado por Javier García. Una de las opciones que analizan es que la Lista 400 de Canelones, que solo en la interna sacó 22.655 y fue la más elegida del departamento, le de sus votos al Senado del Espacio 40 como parte de un acuerdo para maximizar las posibilidades electorales frente a otros bloques del nacionalismo.

En tanto, en la anunciada alianza entre la Lista 71 y el “grupo de los intendentes” también quedan detalles para confirmar el acuerdo. El herrerismo encabezará la plantilla pero la segunda línea será para Sergio Botana como titular y Enrique Antía como suplente. Los dirigentes buscan reubicar nombres debido a que ese movimiento desplazó de la segunda línea a dirigentes de la 71, que además por la ley de cuotas deberán bajar al menos hasta el cuarto lugar. Otro de los temas que se discute en ese bloque es el lugar que ocupará en la lista a diputados por Montevideo el dirigente Pablo Iturralde, que en las internas acompañó la precandidatura de Antía.

Lacalle Pou y sus dirigentes siguen de cerca las negociaciones en el entendido que los acuerdos son claves para conformar una bancada numerosa.

Leonardo Carreño

Alianza Nacional encabezará su lista al Senado con Jorge Larrañaga, seguido de Carlos Moreira y la historiadora Ana Ribeiro. Sin embargo el suplente de Larrañaga al Senado todavía no está resuelto, dijeron a El Observador fuentes aliancistas. Algo similar ocurre con la lista a Diputados en Montevideo, que será encabezada por Jorge Gandini y donde Pablo Abdala irá segundo pero allí tampoco están atadas las suplencias.

Aunque parezca menor para el grueso del electorado, el orden de las suplencias es relevante entre los políticos porque indica una mayor posibilidad de entrar al ruedo parlamentario. Por otro lado, para los líderes, estas situaciones suelen ponerlos en un compromiso y es habitual que generen malhumores dentro de los sectores. 

El “clearing” electoral

En el Frente Amplio el MPP encabezado por José Mujica y Lucía Topolansky en el Senado negocia distintos acuerdos y esperan resolver esta semana. Una de las posibilidades es conformar un sublema con la Lista 1001 (Partido Comunista) y otros grupos, entre ellos la Lista 711. La 1001 llevará primero a Óscar Andrade y segunda a Carolina Cosse. En el oficialismo advierten que ante un eventual sublema Cosse puede verse beneficiada con votos del MPP.

Camilo dos Santos

En el mujiquismo también negocian con los socialistas un acuerdo para tener listas comunes a diputados en distintos departamentos. En ese caso deberán acordar el “clearing” electoral, que consiste en repartirse departamentos donde esperen tener una votación similar para que las representaciones al Senado no queden distorsionadas. Los socialistas, en tanto, negocian un acuerdo por sublema con Casa Grande.

En tanto, luego de competir en las elecciones internas, Mario Bergara presentará este jueves 15 su espacio político. El bloque de Bergara busca una alianza  con el sector Plataforma conformado por el director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto, Álvaro García, que se fue del Partido Socialista, y por Cristina Lustemberg. 

García dijo al semanario Búsqueda que promoverá a su vez un acercamiento entre Bergara y el líder del Frente Líber Seregni, Danilo Astori, quienes están distanciados. Sin embargo, fuentes de Asamblea Uruguay y del Frente Amplio consideran lejana la posibilidad de un acuerdo con el expresidente del Banco Central.

El Nuevo Espacio, en tanto, evalúa integrar en algún acuerdo a Fernando Amado, pero todavía no hay avances en las negociaciones.