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Mayoría de productores afectados por turbonada en Paysandú carece de seguros
La mayoría de los productores propietarios de los invernáculos en los que se registraron daños parciales o totales por la turbonada que hubo este lunes en Paysandú carecen de seguros.
Ese dato es parte de un primer informe elaborado por los directores departamentales del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) de Paysandú (Carlos Oyanarte) y Salto (Andrés Treglia) y el técnico de la Dirección General de la Granja (Digegra) del MGAP en Salto (Fernando Martínez).
En el informe, remitido a la Unidad de Descentralización y Coordinación de Políticas con Base Departamental (MGAP), se detallan los daños generados por la turbonada que sucedió a la hora 7 de este lunes –con ráfagas de viento de 120 km/h– y granizadas puntuales (de escasa magnitud) en la zona de chacras al norte de la capital de Paysandú.
Luis María Carresse (director nacional de Descentralización del ministerio) precisó a El Observador que también hubo daños en áreas productivas de Belén, en Salto.
Los perjuicios ocurrieron básicamente en predios de producción hortícola. La superficie relevada al momento considera 35.720 m2, con daños en el 56% de esa superficie. Se constató, además, que la mayoría de los productores aún no había cumplido con el Registro Nacional Frutihortícola.
Otro dato del informe establece que en las estructuras dañadas había producciones en desarrollo, sobre todo de tomate, morrón y hortalizas de hoja.
El análisis considera que el daño varía según el predio que se considere y que hubo roturas en techos, paños y maderas, con invernáculos volteados y corridos de lugar y destrucciones parciales o totales de esas estructuras.
En las labores de chequeo de daños participaron además la Intendencia de Paysandú y otros actores, como el Instituto Plan Agropecuario, además de los propios productores.
Carresse destacó este martes que hay un monitoreo constante de la situación, con base en dos realidades: hay productores que dedicaron las primeras horas tras la turbonada a rescatar lo más posible de sus cultivos y recién están informando sobre los daños, a la vez que existe la posibilidad de nuevas adversidades en el estado del tiempo.
Sobre el ánimo que percibió en los afectados, a modo de ejemplo de la actitud que existe mencionó: “Hubo un productor que nos contó que su padre tiene 81 años, que nunca les había pasado algo así y que son muchos años de esfuerzo lo que esto les hizo perder, pero que van a seguir adelante y eso es algo que reconforta”.
Carresse dijo que todo el equipo del ministerio está atento a esto, con el ministro Fernando Mattos a la cabeza y que una vez que se disponga de la información definitiva será analizada por las autoridades del MGAP.
Todo eso puede derivar en la toma de decisiones de asistencias, como ha sucedido antes cuando hubo ganaderos y apícolas afectados por o cuando hubo episodios de muertes de aves por exceso de calor, por mencionar algunos casos, con distintas herramientas, entre ellas subsidios o asistencias financieras.
Este martes el ministro Mattos participó en la Mesa de Desarrollo Rural que consideró la situación, junto con los ya mencionados Oyanarte y Treglia; la directora técnica de la Digegra, Natalia Martínez; y el director nacional de la Granja del MGAP, Nicolás Chiesa.
