El expresidente de Casa de Galicia, Alberto Iglesias, condenado a cubrir "la totalidad del déficit patrimonial" de la exmutualista, dijo estar "sorprendido" por la resolución judicial, la cual apelará, y aseguró que todas las denuncias que le hizo el Ministerio de Salud (MSP) fueron "fabricadas".
"De 12 denuncias, en 11 ya demostré que eran equivocadas y falsas, ahora estoy con la 12", expresó Iglesias en una entrevista con Desayunos Informales (Canal 12).
La Justicia ordenó a Iglesias que cubra la "totalidad del déficit patrimonial en beneficio de la masa pasiva del concurso", según informó El País y confirmó El Observador tras acceder a la sentencia con fecha el 11 de diciembre. Además, el exjerarca fue inhabilitado por 20 años para administrar bienes propios o ajenos, así como a representar a terceros.
Según se lee en el documento, "el estado de insolvencia de Casa de Galicia se encontraba determinado por la sumatoria de múltiples elementos causales, exclusivamente derivados de una mala administración, que no supo revertir a lo largo de muchos años una situación deficitaria que fue incrementándose hasta el punto de ser cuatro veces mayor a la media del sector".
Por un lado, el expresidente de la mutualista destacó que el fiscal de la causa, Gilberto Rodríguez, hizo "un gran trabajo y serio", pero criticó que "el juez de concurso (Leonardo Méndez) ahora se apresuró en base a un informe falso" y sobre el que él no pudo "opinar".
"Nunca fui convocado por el juez. Yo esperaba ser convocado, no creí que tomara ninguna resolución hasta no convocarme para dar mi descargo", agregó.
Según Iglesias, "el Poder Ejecutivo y el Ministerio de Salud Pública cerraron Casa de Galicia" y "regalaron el patrimonio" de la exmutualista en su remate: "La cartera de afiliados tiene un valor en sí mismo. Cualquiera paga cualquier plata por una cartera de socios. Acá había 43.000 socios, con un valor estimado mínimo de entre US$25 y 40 millones. ¿Por qué se regaló ese patrimonio? ¿Por qué no se dejó en libertad a los socios para que fuesen a la mutualista que quisiesen? Ahí está parte del dinero que reclaman los trabajadores".
La sentencia marcó diversas irregularidades en el manejo de Iglesias de la mutualista, entre ellos la compra de una clínica por US$ 3,5 millones sin ningún informe técnico previo, y el retiro de US$ 180 mil de un cambio sin pasar por las arcas de la mutualista, y desestimó la condena como cómplices a los socios Juan Carlos Lousada y Marcelo Bonanata.
Al respecto, Iglesias declaró: "Se quería calificar como que existía complicidad entre acciones y decisiones que tomamos con algún privado, en el entendido de que se beneficiaba a algunos en perjuicio de otros. No sucedió eso. Se eligieron caprichosamente ejemplos descolgados para tratar de explicar eso o de asignar eso. Y se nos declaró cómplices de algo que en la resolución se declara como inocentes a los que supuestamente eran cómplices míos, entonces yo soy culpable de no sé qué".
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