Nacional le lleva dos años de ventaja a Peñarol: ¿cómo hizo para ajustar 50% su presupuesto?

Peñarol podrá hacerlo a partir del final de la temporada 2020 (el 31 de diciembre vencen 14 contratos que se renuevan automáticamente hasta la culminación del Campeonato Uruguayo, previsto para febrero o marzo), con el lastre que implica tener el presupuesto más alto del fútbol uruguayo sin éxitos deportivo. El último Uruguayo lo ganó en 2018 y este año fue eliminado de la Libertadores nuevamente en la fase de grupos y en el reenganche de la Sudamericana quedó afuera en su primer cruce.

Bajo la conducción de José Decurnex, Nacional inició su sinceramiento económico en diciembre de 2018, y le lleva dos años de ventaja a Peñarol. Lo mismo ocurrió con tricolores y aurinegros en otras áreas en los últimos 20 años: modernización de su estructura, relanzamiento de obras y mejoras de la infraestructura deportiva, impulso del padrón social y desarrollo de un proyecto de juveniles exitoso. En todos esos rubros, bajo la presidencia de Eduardo Ache y Ricardo Alarcón, Nacional marcó el camino.

En la administración, obligado por las circunstancias, porque no tenían dinero en caja para pagar las cuentas básicas para seguir funcionando, el nuevo presidente, que sustituyó a José Luis Rodríguez, realizó un ajuste económico en todo el club, especialmente en los salarios del fútbol profesional, y aumentó las cuotas sociales para salir del peor momento.

Cada decisión que dio Nacional en el tema económico fue estudiada y resuelta por los especialistas en el tema que Decurnex agrupó en una comisión: Gonzalo Lucas (segundo vicepresidente), Gustavo Amoza (tesorero) y Alejandro Irastorza (secretario). Irastroza se fue del club el último año, para integrar el gobierno de Lacalle Pou.

A los socios se les pidió paciencia y colaboración, y así comenzó a encauzar la institución.

Decurnex heredó el club con el bicampeonato de Peñarol en el Uruguayo, y sin dinero. En 2020, va por el bicampeonato, ajustó los números y tiene estabilidad económica.

Ahora, cuando el golpe de timón en la administración del nuevo presidente se comienza a ver con la perspectiva histórica, le da valor al camino recorrido.

El año 2018, el último de Rodríguez como presidente, el presupuesto mensual del plantel principal de Nacional fue de US$ 1.100.000.

Los futbolistas mejores pagos percibían un salario mensual de US$ 40.000, y el cuerpo técnico cobraba US$ 75.000.

Hace dos años, la economía de Peñarol manejaba un presupuesto superior al de los tricolores, US$ 1.300.000, que mantiene en niveles similares hasta el final de esta temporada. Peñarol aún tiene contratos de futbolistas de US$ 65.000 al mes.

En dos años, Nacional redujo al 50% su masa salarial en el plantel principal (el promedio en 2020 es de US$ 560.000) y en la hoja de ruta que se planteó para su administración pretenden recorrer el último año de gestión de Decurnex con un presupuesto del primer equipo inferior a US$ 500.000.

¿Cómo es posible que Nacional haya bajado su presupuesto a la mitad, proyecte reducirlo un 15% para el próximo año y Peñarol siga en los mismos niveles de contrato de 2018?

Mientras Peñarol mantuvo la misma gimnasia de contratar y pagar sueldos de más de US$ 60.000, cuando llegó Decurnex el nuevo presidente renovó solo un contrato de 14 que vencían, después de 20 días de negociación, el de Gonzalo Bergessio.

Los otros 13 que finalizaban el vínculo se fueron del club: Jorge Fucile, Rodrigo Erramuspe, Alexis Rolín, Alfonso Espino, Luis Aguiar, Santiago Romero, Álvaro González, Facundo Waller, Carlos de Pena, Leandro Barcia, Pierre Webó, Sebastián Rodríguez y Tabaré Viudez.

En enero de 2019, Nacional comenzó una nueva época en su administración. Topeó los salarios en US$ 30.000. Hasta diciembre había jugadores que cobraban US$ 40.000. Y redujo un 40% el rubro salario del entrenador.

Al mismo tiempo ajustó el número de contratos de jugadores que no se formaron en el club y se planteó como objetivo incrementar la presencia de juveniles. Actualmente el 70% del plantel principal son jugadores de la cantera.

Para motivar a los futbolistas formados en el club, mejoró los contratos a las nuevas figuras y extendió los vínculos.

Priorizó a los jugadores de la cantera y a la hora de mejorar las remuneraciones apostó a sus futbolistas.

De 2018 a 2019, redujo el promedio mensual del plantel profesional de US$ 1.100.000 a US$ 680.000.

Este último año, en 2020, volvió a ajustar los contratos, redujo seis cupos y, promedialmente, estableció sus gastos mensuales en el plantel de Primera en US$ 560.000. Un 20% menos que en 2019.

Los seis contratos profesionales que suprimió en enero fueron los de Guillermo Cotugno, Agustín Sant’Anna, Felipe Carvalho, Álvaro Pereira, Mathías Cardacio y el argentino Gustavo Lorenzetti.

Este año, por la pandemia de covid-19, tuvo la particularidad que los jugadores estuvieron tres meses en seguro de paro parcial y que el club complementó los salarios en franjas. Fue el cuarto club de Primera que pagó la mayor parte del contrato a sus jugadores: el club pagó complementos de 60% a quienes ganan menos de US$ 5.000 hasta 25% en quienes perciben más de US$ 15.000

Liverpool, City Torque y Deportivo Maldonado pagaron 100% de los salarios a sus jugadores durante el período en que los futbolistas estuvieron en seguro de paro parcial porque no hubo fútbol por la pandemia.

Para 2021, Nacional se planteó bajar su presupuesto mensual por debajo de los US$ 500.000, informaron desde el club.

¿Cómo pretenden hacerlo? Debido a que ya no puede ajustar más los topes salariales y los contratos, porque con los números actuales no es atractivo para futbolistas extranjeros venir a Uruguay, la alternativa a la que recurrirán es la reducción de contratos profesionales. Actualmente el plantel principal tiene 30. Esta tarea la abordarán el próximo año.

Se va Santi Rodríguez y debe negociar con Mejía

El 11 de enero, cuando el período de pases internacional ya esté abierto, Santiago Rodríguez será el primer jugador en dejar Nacional.

Los tricolores negociaron la ficha del juvenil al Grupo City, y los ingleses se llevarán al delantero a algunas de sus filiales en el exterior.

Esa será la primera baja que tendrá Nacional de cara al cierre de la temporada 2020, en la que los tricolores no podrán recibir incorporaciones, salvo de jugadores libres.

Nacional ni ningún equipo de Primera podrá contratar futbolistas de otro club para jugar el Clausura, que debería comenzar el 8 de enero o el 12 de enero ya que para 2021 quedarán pendientes los partidos de Defensor Sporting-Boston River y Rentistas-City Torque.

Rodríguez es el segundo jugador que Nacional negocia a Grupo City, el primero fue Renzo Orihuela. En el caso del juvenil se quedará en los tricolores hasta diciembre 2021, salvo que el grupo empresarial lo quiera para dos de sus clubes: Girona a Manchester City, lo que de momento no está en los planes.

El otro que debe negociar su continuidad es Luis Mejía. El golero finaliza el vínculo con los tricolores el 31 de diciembre.

Termina en circunstancias que no imaginaba vivir. Tras perder la titularidad con Sergio Rochet, el golero se negó a ir al banco de suplentes en el único partido que pudo jugar en noviembre, por su actividad con la selección de Panamá y las cuarentenas que debía realizar al regresar a Montevideo.

La continuidad depende de Mejía. Tiene uno de los contratos más altos del plantel, y entrará en los ajustes salariales que Nacional tiene previsto para 2021.

Actualmente, el panameño es el segundo golero del plantel principal.