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"Que los que tienen más, paguen más": así es el ajuste en la contribución con el que la IM busca potenciar obras
“Que los que tienen más paguen más y los que tienen menos paguen menos”. Las palabras del director de Recursos Financieros de la Intendencia de Montevideo (IM), Mauricio Zunino, que reeditan un postulado histórico de la izquierda uruguaya, sintetizaron una de las vías por las que la administración de Carolina Cosse apuesta a engrosar su recaudación de modo de potenciar la inversión en el departamento.
En el marco de su rendición de cuentas –entregada este jueves a la Junta Departamental–, la comuna anunció un aumento en la contribución inmobiliaria para los 25 mil padrones más caros, al tiempo que prometió una disminución para los de menor valor de mercado.
Ese retoque va a redundar en un incremento de US$ 12,5 millones a partir del año que viene en los ingresos por este concepto, según consta en el planillado oficial al que accedió El Observador.
Zunino –que en estos días asumió como intendente interino– planteó que esto permite "avanzar en la justicia tributaria", en tanto para 2024 ya habrá supuesto una rebaja para el 60% del total de padrones de la capital.
¿Cómo va a ser este ajuste tributario?
Hoy en día, la contribución se calcula a partir de un monto imponible por el valor real previsto en la Dirección de Catastro, clasificados en cinco tramos con alícuotas progresivas.
Según el proyecto al que accedió El Observador, la IM entiende que ese esquema tiene un "importante problema de eficiencia y falta de progresividad", dado que a partir del cuarto tramo aplica la misma tasa a propiedades que pueden ser "muy diferentes".
Para adecuar los valores catastrales a sus respectivos valores de mercado –hoy están desactualizados– la comuna se basó en una consultoría de Estudio Kaplan que establece que el primero representa poco menos de un tercio del segundo, por lo que su propuesta se construye "asumiendo una relación genérica aproximada entre ambos de 3 a 1".
Con esa salvedad, la IM modificará los tramos a partir de 2023. El cuarto tramo pasará a regir para los padrones que tengan un valor imponible (en base a información catastral) de entre $3,9 millones y $6,8 millones –antes el rango era bastante más amplio–. Dentro de esa escala, la tasa a cobrar seguirá siendo del 1,20% del valor imponible. El siguiente tramo comprenderá a las propiedades de entre $6,8 millones y $13,6 millones, y en ese marco la alícuota será de 1,65%. Y para el rango de entre $13,6 millones en adelante, la tasa a pagar pasará a ser 1,80%
Esos cambios alcanzan a los padrones cuyo valor de mercado es superior a US$ 500 mil.
Las otras modificaciones apuntan a reducir el tributo, y empezarán a regir en 2024 para las propiedades con valor de mercado inferior a US$145 mil, las que constituyen cerca de tres cuartos del total de padrones que hay en la capital. El ajuste de la alícuota para ese primer tramo de la escala pasará de 0,25% a 0,18%, al tiempo que el porcentaje rebajado operará sobre los primeros US$ 60 mil (la fracción del primer tramo) del inmueble.
La IM también quiere incrementar el adicional correspondiente a drenaje pluvial en dos puntos porcentuales, el cual pasará de 10% a 12% a partir del año que viene. Este apartado se computa sobre el monto de contribución que se atribuye a cada padrón. La administración fundamentó este cambio en la "necesidad de contar con recursos que apuntalen al menos mínimamente el financiamiento de obras relativas al saneamiento y drenaje de la ciudad", a raíz del fracaso del préstamo del BID por falta de apoyos opositores.
Mientras tanto, la Junta comienza a discutir un proyecto paralelo en que la administración busca conseguir un endeudamiento por hasta US$ 50 millones para financiar obras de vialidad y medidas de limpieza. El crédito rondará los US$ 36 millones a pagar para el final del período, por lo que saldrá aprobado con votos del Frente Amplio, sin necesidad de mayorías especiales.
En la tarde de este viernes concurrirá al legislativo departamental el coordinador de Inversiones de la IM, Pablo Ferreri, para iniciar las conversaciones sobre el tema.
