Qué resultados tuvo la medición de la calidad del aire en dos sesiones del Parlamento

La concentración de dióxido de carbono es un medidor de la calidad del aire. Hay consenso en que, cuando el nivel de ese gas en un ambiente es superior a las 800 partículas por millón (ppm), las personas en ese espacio están respirando 1% de aire que ya fue respirado por otras personas. En el marco de la actual pandemia por covid-19 se ha convenido que entornos con más de 800 ppm podrían representar un mayor riesgo de contagio si hay una persona con el virus en el mismo ambiente. 

En el Senado la sesión del 15 de junio comenzó a las 09:21 y los valores de dióxido de carbono estaban en 500 ppm. Así lo indicó el resultado del monitoreo al que accedió El Observador. Media hora después el registro rozaban las 800 partículas por millón y a las 10:21 fue superada esa marca, manteniéndose por encima de ese nivel durante toda la reunión, hasta las 12:26 y llegando en algunos momentos a las 900 ppm. 

Para el informe los niveles registrados fueron aceptables, considerando que en la sala se utilizan tapabocas. De todos modos los médicos resaltaron que estos valores fueron relevados en un punto distante a los senadores, por lo que posiblemente en sus asientos el registro real haya sido superior. 

Esto no pudo ser verificado ante el impedimento reglamentario de que las personas que realizaron el estudio estuvieran en la sala. 

Los valores fueron menores en la Cámara de Diputados, debido al mayor tamaño de la sala y a una mejor ventilación natural.  Al inicio de la sesión, a las 16:20, estaban en el entorno de las 500 ppm. El punto máximo fue de casi 700, a las 17:12. Desde allí y hasta al final de la reunión, a las 18, se retomaron los valores originales. 

El estudio dejó un pedido particular a los legisladores: no es recomendable retirarse la mascarilla al hablar. 

“Si la mascarilla interfiere con la voz se sugiere usar quirúrgica y micrófono a mayor volumen”, se señala. “Hablar es un momento de alto riesgo, no solo porque la persona se expone a inhalar los aerosoles de quienes estén allí sino también porque al no usar mascarilla se pierde el ‘control de la fuente’ y si esta persona tiene covid puede incrementar el riesgo de contagio”, sostuvo. 

Además fue desalentada la realización de sesiones largas. Esto debido al deterioro de la calidad del aire una vez transcurridas tres horas, ya que los cuartos intermedios ayudan pero no son suficientes para asegurar la calidad del aire.