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Retorno gradual de sectores permite proyectar menor caída de actividad, según BCU
El Comité de Política Monetaria (Copom) del Banco Central del Uruguay (BCU) realizó este jueves una nueva reunión de monitoreo para evaluar la coyuntura y resultados de la política monetaria.
“Si bien la evolución de la actividad económica local evidencia las consecuencias de la pandemia, el retorno gradual de la actividad en algunos sectores permite proyectar caídas menores a las esperadas inicialmente”, dice un pasaje del comunicado.
En un contexto marcado por las consecuencias económicas de la pandemia generada por el covid-19, el Copom evaluó en particular el crecimiento de la demanda de dinero, y el comportamiento de la inflación y las expectativas, al tiempo que reafirmó su compromiso de llevar la inflación al rango meta de entre 3% y 7% en los próximos 24 meses.
“La inflación alcanzó el 10,86% en el año móvil cerrado a abril, como consecuencia de la variación de los bienes transables internacionalmente, el aumento del tipo de cambio y la actualización de las tarifas públicas. Asimismo, la última Encuesta de Expectativas, publicada el día 20 de mayo, muestra un guarismo de 8,25% a abril 2022, por encima del rango objetivo para ese horizonte, lo que sigue siendo un foco de atención para este Comité”, destacó el comunicado.
Además, señaló que en este período la demanda de dinero ha crecido de manera sostenida, por encima de los niveles esperados, principalmente guiada por un motivo de precaución ante la incertidumbre creada por la emergencia sanitaria. En este marco se verificó una variación interanual del agregado monetario M1' -suma de la emisión de dinero en poder del público, los depósitos a la vista y las cajas de ahorro del público en el sistema bancario- de 8,7% a abril de 2020.
“Es esperable que la demanda de dinero se mantenga en estos niveles por el resto del trimestre, con una variación interanual del agregado monetario M1’ en el entorno del 7,5 %, por encima de la referencia indicativa definida para el segundo trimestre del año en el último COPOM”, dice el reporte.
De acuerdo al Copom, el entorno económico internacional continúa evidenciando consecuencias negativas a nivel económico debido al avance global del covid-19, con un impacto significativo en la región.
De todas formas, destacaron que luego de medidas expansivas de los bancos centrales a nivel mundial, los mercados globales se estabilizan y el flujo de capitales a países emergentes muestra cierta recuperación.
“En función de la evolución de la actividad económica, de la inflación y de las expectativas de inflación, valoradas con preocupación por este Comité, y de acuerdo con la coyuntura y perspectivas macroeconómicas, el Copom estimó necesario seguir implementando una política monetaria que acompaña la actual situación pautada por la emergencia sanitaria, comprometida con asegurar la liquidez y que no existan restricciones en el mercado de dinero”, explicaron.
