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Un discurso de ARU que criticó y a la vez pidió aplausos para el gobierno
Gabriel Capurro, presidente de la Asociación Rural del Uruguay, en su discurso de clausura de la 114a Exposición de Ganadería mezcló críticas y elogios al gobierno. En ese marco, le pidió varias veces que no ponga los bueyes delante de la carreta, apelando a un viejo dicho campero, por ejemplo cuando señaló que primero está la competividad y luego los planes sociales.
“Una economía atrae inversiones, las inversiones trabajo, el trabajo crecimiento, el crecimiento mejora la recaudación y la recaudación permite tener políticas de Estado sólidas, en educación, seguridad y salud (...) cuando ponemos la carreta delante de los bueyes la carreta se para, lo primero es la competitividad”, enfatizó.
Apenas comenzó su oratoria –duró una hora y 37 minutos y fue el discurso más extenso de un ruralista en la Rural del Prado en al menos las últimas décadas–, Capurro advirtió que iría “directo a la yugular” y que lo que diría no iba a ser agradable, no solo para los jerarcas, también en ciertos casos para sus compañeros.
Conforme fue hilvanando cuestionamientos al gobierno surgieron aplausos espontáneos, pero también hubo otros aplausos que él sorprendiendo solicitó cuando citó aspectos positivos. Por ejemplo cuando elogió a dos ministros que estaban a pocos metros, a Víctor Rossi –ministro de Transporte– por los progresos en infraestructura vial en este período y a Enzo Benech –ministro de Ganadería– por acciones relacionadas con el acceso a los mercados (en lo que involucró al Ministerio de Relaciones Exteriores) y con el cuidado ambiental.
Elogió “el esfuerzo del presidente (Tabaré) Vázquez y del canciller (Rodolfo Nin Novoa) para la firma del acuerdo con la Unión Europea”, la apuesta de Vázquez a un “gobierno digital”, al Plan Ceibal y la creación de la Universidad Tecnológica del Uruguay.
Entre sus críticas, dijo que el gobierno “gasta mucho” y que Uruguay es “carísimo” para agregar valor. Afirmó que “todos sacamos músculo, menos el Estado que sigue acumulando grasa (...) queremos un gobierno con la misma eficiencia y productividad que nos pide”. En otro momento reflexionó: “Salarios altos y dólar bajo es pan para hoy y hambre para mañana”. Y que esa es otra carreta delante de los bueyes.
Denunció luego que hace poco se aprobaron más de 2.000 pases en comisión, “gente que les estamos pagando el sueldo para que trabajen en la campaña política”.
Otro aspecto considerado fue el de la instalación de una nueva planta de UPM. Dijo que tiene aspectos positivos, como consolidar al sector forestal, pero que no fue la forma adecuada en la que se gestionó el acuerdo, excluyendo a otros partidos políticos: “UPM 2 debe ser la última planta de celulosa que se instale en el país en estas condiciones”, expresó.
En el cierre de la oratoria una vez más puso la mira en el tema clave: “Si construimos competitividad vamos a construir un país mejor, más justo y solidario”.
Actitud antidemocrática
