Leonardo Fernández fue clave en el triunfo que Peñarol logró el martes contra Atlético Mineiro por la penúltima fecha del grupo G de la Copa Libertadores. Dos tremendos tiros libres ejecutados por su mágica pierna izquierda ambientaron los goles, de rebote, de Lucas Hernández y Maximiliano Silvera.
Fernández, de 25 años, utiliza una técnica de ejecución que es conocida como knuckleball.
En el mundo de los Youtubers y TikTok, que tienen amplia penetración en las generaciones jóvenes, esta técnica de patear tiros libres es un tema muy recurrente.
El knuckleball es la técnica que hizo célebre Cristiano Ronaldo con su impresionante pegada, una de las mejores del mundo.
Embed - Cristiano Ronaldo TOP 10 Free Kicks Ever | HD
A diferencia del efecto tradicional con el que pateaban Diego Maradona o Diego Forlán y como lo hace actualmente Lionel Messi, donde el balón gira sobre su eje, en el knuckleball la pelota no sale girando sino que el golpeo seco la hace subir y bajar. A eso se le suman efectos y movimientos de la pelota que resultan imprevisibles para los goleros.
Peñarol disfruta de un pateador notable
Contra Cerro Largo y Cerro, por el Torneo Apertura, Fernández había marcado con tiros libres directos.
Contra Atlético Mineiro fue clave con los dos tiros libres. Mirá en esta nota los goles del manya.
El volante zurdo surgido en Fénix lleva 10 goles anotados en 18 partidos oficiales con Peñarol.
Dos fueron de tiro libre y seis de penal, donde por ahora es infalible. Siete fueron por el Apertura y tres por la Copa AUF Uruguay, con hat-trick a Liverpool.
La técnica del knuckleball proviene del béisbol
Según el portal de la Major League Baseball (MLB) el knuckleball es una técnica de lanzamiento inventada por Toad Ramsey. En español, "knuckle" significa nudillos (y "ball", pelota).
El serpentinero, como se le decía a Ramsey "descubrió la bola de nudillos (knuckleball) tras un desafortunado accidente. Trabajando como obrero, Ramsey se cortó el tendón en el dedo índice, que lo obligó a agarrar la bola casi con las uñas. Esto produjo dos curvas diferentes o lo que calificaron como drop-balls", dice el portal de la MLB.
"Fue un lanzamiento devastador y los bateadores no lo lograron descifrar", agrega.
Fernández tiene un rango de pegada muy amplio.
En las cercanías del área, le pega con rosca y mucho efecto.
El primer gol de Peñarol el martes contra Atlético Mineiro se generó con esa pegada. El balón dio en el travesaño y luego marcó Lucas Hernández.
El segundo, de más lejos, fue con un knuckleball que obligó a Everson a rechazar tras volar. Maxi Silvera aprovechó para marcar de rebote.
En Fénix ya destacaba por su imponente técnica de pegada que luego paseó por Universidad de Chile, Toluca, Tigres y Fluminense, antes de recalar en Peñarol.