El gobierno uruguayo repudió, a través de Cancillería, el atentado ocurrido este domingo en Australia, donde al menos 16 personas murieron y decenas resultaron heridas en el marco de un tiroteo terrorista que tenía como objetivo a la comunidad judía durante una celebración del primer día de la festividad de Janucá en Bondi Beach, una de las playas más populares de Sídney.
"El Gobierno de Uruguay condena el atentado ocurrido hoy en Sydney, Australia, en el que murieron al menos 16 personas y resultaron heridas cerca de 40", publicó el Ministerio de Relaciones Exteriores en su web oficial.
Además, la cartera agregó que el país "manifiesta sus condolencias y solidaridad al pueblo y al Gobierno de Australia, así como a las familias de las víctimas y a los heridos".
"Uruguay reafirma su más enérgico repudio a todo acto de violencia injustificado, así como a las manifestaciones de odio, extremismo, racismo y antisemitismo", cierra el comunicado.
Padre e hijo, los presuntos autores de la masacre antisemita
Los presuntos autores de la masacre antisemita han sido identificados como padre e hijo. Se trata de un hombre de 50 años, quien falleció tras enfrentarse a la policía, y su hijo de 24 años, quien permanece en estado crítico bajo custodia policial.
Las autoridades australianas confirmaron que el saldo del atentado terrorista ocurrido en Bondi Beach, Sídney ha ascendido a 16 muertos, incluyendo a un niño de 12 años, y al menos 40 heridos, entre ellos cuatro menores.
La vocera de la policía dijo durante una conferencia de prensa que las investigaciones mostraron que sólo dos agresores fueron responsables del ataque durante una celebración de una festividad.
El ataque dirigido a la comunidad judía
El ataque, que tuvo lugar en la tarde del domingo en la popular Bondi Beach, coincidió con la celebración de la festividad judía de Janucá en el cercano parque Archer, donde miles de personas se habían reunido.
Según las autoridades, el ataque fue directamente dirigido contra la comunidad judía. El primer ministro australiano, Anthony Albanese, lo calificó como un "acto de maldad, antisemitismo y terrorismo" y aseguró que las investigaciones apuntan a que los atacantes tenían la intención de atacar objetivos judíos.
El momento de la masacre antisemita en Bondi Beach este domingo 14 de diciembre.
Además, se encontró un vehículo vinculado a uno de los atacantes, en cuyo interior había artefactos explosivos improvisados, lo que hace temer una posible intención de un ataque de mayor escala. El gobierno australiano ha sido tajante en su repudio a este atentado, subrayando la gravedad de lo ocurrido.
Identificación de los atacantes
Uno de los presuntos atacantes fue identificado como Naveed Akram, un albañil del suroeste de la ciudad, de 24 años, que había perdido su trabajo recientemente, según informó el medio local ABC News a través de una fuente anónima cercana a un oficial policial.
Akram, de presunto origen pakistaní, estudió en la Universidad Central de Queensland en Sídney y en la Universidad Hamdard en Islamabad. Las autoridades australianas informaron que la Policía allanó su vivienda ubicada en el suburbio de Bonnyrigg este domingo por la noche (hora local).
En medio del ataque, un civil fue captado en imágenes virales intentando desarmar a uno de los atacantes. El hombre, vestido de civil, logró arrebatarle el rifle al agresor tras un forcejeo, evitando que la situación escalara aún más. Sin embargo, el atacante restante continuó disparando, lo que resultó en más víctimas. Las autoridades aún no han confirmado la veracidad de las imágenes, pero la acción heroica del civil ha sido ampliamente elogiada en los medios.
El posible vínculo con Irán
Un alto funcionario de seguridad israelí ha declarado que, en los últimos meses, ha aumentado la actividad iraní relacionada con ataques contra objetivos israelíes y judíos en diversas partes del mundo, incluida Australia.
Se investiga la posibilidad de que Irán esté involucrado en la planificación de estos ataques mediante grupos sustitutos o redes de incitación. Además, se ha señalado que Hezbolá, Hamás y otros grupos extremistas podrían estar involucrados en esta red de ataques dirigidos contra comunidades judías.
La postura de Australia frente a Irán
El gobierno de Australia ha adoptado una postura firme contra Irán en relación con ataques previos a objetivos judíos en el país. Anthony Albanese reveló que la agencia de inteligencia ASIO había concluido que el gobierno iraní estaba detrás de varios ataques antijudíos en Sídney y Melbourne.
Entre ellos se incluyen el incendio de una empresa de alimentos kosher en Sídney en octubre de 2024 y el incendio de la sinagoga "Adat Israel" en Melbourne en diciembre de 2024. Ante estos hechos, Australia rompió sus relaciones diplomáticas con Irán y condenó enérgicamente estos ataques.
Denuncia de la comunidad musulmana y países árabes
El Consejo de Imanes de Australia se ha sumado inmediatamente a las condenas en nombre de la comunidad musulmana del país. "Estos actos de violencia y crímenes no tienen cabida en nuestra sociedad. Los responsables deben rendir cuentas plenamente y enfrentarse a todo el peso de la ley", afirma el comunicado.
"Nuestros corazones, pensamientos y oraciones están con las víctimas, sus familias y todos aquellos que presenciaron o se vieron afectados por este ataque profundamente traumático", han añadido.
Una de las primeras condenas de los países árabes ha llegado de Qatar, que no menciona a la comunidad judía atacada y se limita, a través de un comunicado de Exteriores a "reiterar su firme postura contra la violencia y el terrorismo, independientemente de sus motivos o causas".
También el Gobierno de la Autoridad Palestina ha condenado el ataque de Sídney y ha expresado su "plena solidaridad y apoyo del Estado de Palestina a la nación amiga de Australia, su gobierno y su pueblo, en esta dolorosa tragedia".
Ha expresado así su "rechazo categórico a todas las formas de violencia, terrorismo y extremismo, que son contrarias a los valores humanos y principios morales".
Cooperación internacional para investigar los vínculos transnacionales
El aumento de los incidentes antijudíos y la posible vinculación de Irán con los ataques ha llevado a un refuerzo de la cooperación en inteligencia entre Australia e Israel, así como otros aliados internacionales. Las autoridades están trabajando conjuntamente para investigar si estos atentados forman parte de una red transnacional de terrorismo dirigida desde Irán o si existen vínculos con grupos extremistas como Hezbolá o Hamás.