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Ancap promoverá granjas eólicas en el mar para producción de hidrógeno verde
El hidrógeno verde es clave para la descarbonización del sector energético en el mundo. Y es también una oportunidad que tiene Uruguay para aprovechar su potencial como productor de energías renovables.
Ancap presentará este martes los detalles del programa H2U Offshore, cuyo objetivo es la producción de hidrógeno verde para exportación a partir de granjas de generación eólica instaladas en el mar.
La empresa busca promover un programa de largo plazo para atraer inversión privada de grandes empresas internacionales mediante distintos incentivos, y sin riesgo para el Estado. Se trata de proyectos cuya concreción requiere desembolsos millonarios estimados entre US$ 1.000 millones y US$ 3.000 millones.
Para ello, Ancap ya tiene identificadas cuatro regiones en el mar territorial uruguayo conformadas por cuatro bloques de 500 km2 cada uno, que próximamente se pondrán a consideración de empresas interesadas, en una ronda de consultas que también incluirá un modelo de contrato para esas licitaciones.
A grandes rasgos, ese modelo contemplará distintas etapas que van desde consulta, investigación, desarrollo y análisis. Una vez cumplidas esas etapas el inversor privado podrá optar si hace o no la inversión. La concesión de los bloques que se está planificando es a 25 años de plazo y contempla la instalación de plataforma, hidrolizador (artefacto que produce la hidrólisis) y planta de amoniaco verde.
“Lo que estamos apostando desde el gobierno es a generar una instancia de atracción de inversiones. Que el negocio sea del privado, que el privado se encargue de la colocación del producto y que le pague al Estado. Pero eso es largo plazo. (…) Estas inversiones solo se pueden hacer con proyectos de financiamientos atados a una demanda cierta. (…) Si logramos generar una oferta de bloques que sea atractiva vamos a terminar atrayendo empresas cuando la demanda les cierre”, afirmó días atrás el presidente de Ancap, Alejandro Stipanicic, durante un congreso organizado por la Asociación Uruguaya de Energías Renovables.
Según el jerarca, Ancap debe ser el agente comercial del Estado para la producción de hidrógeno offshore y generar la promoción e incentivo para atraer a las empresas y animarlas a invertir en el país.
Se considera que Uruguay debe aprovechar la fuerte presión de la demanda hacia la descarbonización y la estabilidad y prestigio del país, junto con la experiencia que ya se tiene en contratos offshore con petroleras internacionales y la potencialidad eólica en el mar territorial y la zona económica exclusiva.
“No se necesita un puerto de aguas profundas porque van a una plataforma y en esa plataforma está el hidrolizador y se produce el hidrógeno. Quizás ahí mismo se haga el amoniaco tomando el nitrógeno del aire y ahí atraque un barco y se lleva para otro lado”, dijo Stipanicic.
Las áreas de 500 km2 que se propone ofrecer la empresa tienen una capacidad nominal conservadora de 1,25 GW (gigaWatts)de potencia y una capacidad productiva de no menos de 100 toneladas de hidrógeno por año. Además de las condiciones tecnológicas favorables, el criterio de selección tuvo en cuenta que las interferencias y los riesgos de afectación ambientales son mínimos.
La calidad de los vientos en el mar territorial es “bastante pareja”, pero según Stipanicic, hay una zona donde las condiciones de generación eólica “son mejores” que en el Mar del Norte, donde hay en marcha varios proyectos con granjas eólicas offshore.
El hidrógeno verde es producido por electrólisis del agua a partir de electricidad proveniente de fuentes renovables. Esta opción (hidrógeno verde) ofrece luego la transformación en varias formas de energía, como electricidad, gas sintético o calor, con múltiples aplicaciones para la industria o la movilidad. El proceso de producción a partir de agua y energía eléctrica de fuente renovable es limpio y no tiene emisiones de CO2. Uno de sus grandes potenciales está en que es energía almacenable que se puede comprimir y transportarse de un lugar a otro.
Según Stipanicic, los países y regiones centrales necesitarán más hidrógeno del que pueden producir con sus recursos renovables para cumplir con sus metas de carbono neutralidad. A modo de ejemplo, hay países como Japón. Alemania, Países Bajos, Bélgica, Japón y Corea del Sur que ya están generando demanda a 2030, 2040 y 2050. Un estudio realizado el año pasado por Ancap y UTE en conjunto con el puerto de Rotterdam arrojó como conclusión que en el onshore el potencial de generación eólica de Uruguay pueden ser de 30 GW y en el offshore de alrededor de 300 GW.
