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Bolsa de Valores iba a cambiar cerraduras en CVM pero no lo hizo en una de ellas y familiares de Goldring ingresaron
Una de las primeras medidas que pensó en tomar la Bolsa de Valores de Montevideo (BVM) una vez que el Banco Central del Uruguay (BCU) desplazó a Sara Goldring y dos de sus hijos de la titularidad de la corredora Compañía de Valores Mobiliarios (CVM) fue cambiar las cerraduras de todas las dependencias donde funcionaba con el objetivo de resguardar pruebas que pudieran ser relevantes en la investigación.
La idea estaba prevista para el viernes 5 de agosto, pero por razones logísticas el cambio en una de las dependencias fue pospuesta para el lunes 8, una modificación que -sin saberlo- habilitó a que Mauricio Cukier y Marcos Cukier –esposo e hijo de Sara Goldring– ingresaran al local de CVM ubicado en la calle Colón de la Ciudad Vieja y se retiraran con bolsas negras cuyo contenido es una incógnita.
El presidente de la BVM, Ángel Urraburu, confirmó a El Observador que pensaban cambiar las cerraduras pero no les dio el tiempo. Ahora varios de los damnificados reclamaron ante la Justicia que se investigue su ingreso y se incauten las bolsas negras.
El escrito presentado por el estudio Donnángelo-Durán-Sasson plantea que esas bolsas negras podían contener "trascendentes evidencias". "Ello sin dudas debe ser investigado, en aras de que esta conducta permite inferir sin hesitaciones la intención inequívoca de ocultar evidencias fundamentales para esta causa, entorpeciendo consecuentemente el accionar de la Justicia", afirma el texto.
La presencia del esposo y el hijo de Goldring quedó registrada en cámaras de seguridad cuyas filmaciones están en manos de la Bolsa de Valores y muestran a ambos ingresar al local y retirarse con las bolsas negras varias horas después.
Goldring es señalada por decenas de clientes que la acusan de estafa y apropiación indebida, con pérdidas que están en el entorno de los US$ 100 millones y entre 300 y 400 damnificados.
El viernes, la jueza María Helena Mainard embargó las cuentas bancarias y los depósitos de Goldring y de CVM. La resolución se tomó tras un reclamo de los damnificados representados por el Estudio Bragard Abogados.
Antes, la Justicia había dispuesto el cierre de fronteras para Goldring y para Martín Cukier (uno de sus hijos) por 180 días. Los damnificados han pedido que la medida se extienda a su hijo Marcos por "inminente peligro de fuga".
Si bien Marcos Cukier no figura como propietario de la empresa, ha sido una de las caras visibles de CVM luego del desplome de su portafolio, y el escrito presentado ante la Justicia lo describe como el "cerebro principal de la mesa de operaciones" durante los últimos meses.
En representación de los damnificados, los abogados plantean que el involucrado ha comunicado en el colegio de sus hijos que, a raíz de las denuncias, abandonarán el país. Su eventual salida de Uruguay, aduce el escrito, supone una "consecuente sustracción del proceso".
El caso está siendo investigado por el fiscal de Delitos Económicos, Enrique Rodríguez.
En un escrito, varios damnificados representados por el estudio de abogados Ramírez y Asociados pidieron al BCU que se les brindara "en forma inmediata" el acceso "permanente e irrestricto" a "todas las actuaciones administrativas" relativas a CVM y solicitaron exigirle tanto a la corredora de bolsa como al interventor "la presentación de un informe detallado y documentado de cada una de las colocaciones realizadas por cuenta y orden de los clientes" durante el período en el que la empresa de Goldring ocultó el verdadero estado de las cuentas y los valores.
La familia Goldring ha asegurado que no cometieron una estafa y que los clientes habían autorizado que se realizaran inversiones con un perfil agresivo.
